Poco tiempo tardó la Corte Suprema de Justicia en resolver el conflicto de competencias que planteó la defensa de Nicolás Petro, cuando fue citado para el lunes pasado la audiencia de acusación en los tribunales de Barranquilla y sus abogados reclamaron que el caso debería ser llevado en Bogotá, la misma ciudad en que se realizó la legalización de la captura.
La Sala de Casación Penal de la Corte Suprema de Justicia determinó de manera unánime que el proceso penal que se adelanta contra Nicolás Petro, por los delitos de lavado de activos y enriquecimiento ilícito, debe continuar en el Juzgado Segundo Penal del Circuito Especializado de Barranquilla.
Para todos los magistrados es claro que, aunque los hechos habrían ocurrido tanto en Bogotá como en Barranquilla, la mayoría de presuntos ilícitos, y los más graves (lavado de activos), habrían ocurrido en la capital del Atlántico, explicaron desde el alto tribunal.
La solicitud de la defensa del hijo del presidente Gustavo Petro fue vista como una estrategia para evitar la acusación y el inicio formal del juicio contra el exdiputado de la Asamblea del Atlántico, como efectivamente ocurrió, y que obligó al juez a aplazar la audiencia que la última palabra la tomara la Corte Suprema, como acaba de suceder.
En ese momento, el fiscal del caso, Mario Burgos, también advirtió que se trató “de una maniobra desleal para dilatar el proceso”. Advirtió que la defensa de Nicolás Petro está actuando de mala fe para que la audiencia no pueda llevarse a cabo, pues tuvo conocimiento de que inicialmente iba a solicitarse una nulidad y que ahora, de manera sorpresiva, se hace una petición de impugnación de competencia.
El juez, por su parte, señaló que aunque podría rechazar de plano la solicitud por infundada la incompetencia, hay también hechos ocurridos en la ciudad de Bogotá, por lo que hizo traslado a la Corte para que se pronuncie.
“Se le hace un llamado a la defensa para que, acorde con la lealtad procesal y los principios que rigen el Código de Procedimiento Penal, no propicie dilaciones o demoras en los procesos. Si la Corte devuelve este proceso por competencia, este juzgado le compulsará copias disciplinarias al doctor Sebastián García Rincón inmediatamente cuando se asuma la continuación de la competencia”, dijo el juez en la audiencia en la que se hizo la solicitud.
El mismo Nicolás Petro también protestó en redes sociales: “Las incoherencias y arbitrariedades de la Fiscalía salen a flote. El juez decidió que la Corte Suprema defina la competencia territorial para tramitar el proceso, si la Fiscalía tenía tan claro que la competencia era Barranquilla, ¿por qué me llevó capturado y esposado a Bogotá? Mis garantías procesales fueron cercenadas. Poco a poco iremos demostrando las arbitrariedades y mentiras de la Fiscalía”.
Sin embargo, más allá de los argumentos de Nicolás Petro y de sus abogados, ya es un hecho que el proceso se mantendrá en Barranquilla y que en próximos días se hará la citación para presentar la acusación contra el hijo del presidente en el proceso en el que la principal testigo es su exesposa, Day Vásquez, quien se acogió a principio de oportunidad y prenderá el ventilador.
De acuerdo con Day, el hijo del presidente Gustavo Petro recibió dineros oscuros de personas como Samuel Santander Lopesierra, conocido como el Hombre Marlboro, y de Gabriel Hilsaca, hijo de Alfonso ‘el Turco’ Hilsaca. El mismo Nicolás Petro reconoció ante la Fiscalía que recibió dineros irregulares recibidos de empresarios y particulares, los cuales fueron a parar a la campaña de su padre.