La Procuraduría General de la Nación abrió indagación preliminar en averiguación de responsables, por presuntas irregularidades y omisión en el servicio por parte de agentes de la Policía Nacional y funcionarios de la Alcaldía Mayor de Bogotá, al permitir el desarrollo del partido Santa Fe vs. Atlético Nacional el pasado 3 de agosto en el estadio Nemesio Camacho El Campin, en el que se presentaron disturbios y desmanes por parte de algunos hinchas.
La Procuraduría advierte que la acción disciplinaria se adelantará contra funcionarios por determinar de la Policía Nacional y Alcaldía Mayor de Bogotá. Y es que, lo que pintaba como una fiesta en El Campín, por los más de 500 días sin público en las tribunas, se empañó en el entretiempo, cuando Santa Fe y Nacional se fueron al descanso con empate 0 a 0.
Mientras los técnicos brindaban su charla en los camerinos, en las gradas se armó una pelea monumental que comenzó en la tribuna familiar donde había hinchas de ambos equipos. Posteriormente, seguidores de Nacional ocuparon la tribuna norte acorralando a los hinchas cardenales.
En este caso puntual, el Ministerio Público solicitó “la práctica de diferentes pruebas con el fin de verificar la ocurrencia de la conducta, determinar si es constitutiva de falta disciplinaria o si se ha actuado al amparo de una causal de exclusión de la responsabilidad”.
En medio de lo que estaba ocurriendo esa noche, al percatarse del conato de enfrentamientos, espectadores de Santa Fe ubicados en la tribuna sur salieron a la cancha a enfrentarse con los del visitante. La Policía intervino hasta ese momento, sacando niños, ayudando a mujeres y madres de familia: “Son unos desadaptados, no es posible que los hinchas de Nacional invadan a tribuna donde están las familias y ataquen niños y señoras”, dijo en su momento Eduardo Méndez, presidente de Santa Fe, al canal Win Sports.
Incluso, algunos de los que participaron de estos hechos usaron las vallas publicitarias ubicadas en el terreno de juego para atacarse, mientras la poca fuerza pública quedaba en medio de los disturbios.
Por eso, llama la atención el dispositivo de seguridad desplegado para este juego, teniendo en cuenta que es denominado clase A y que antes de cada compromiso el equipo organizador junto con las autoridades se reúnen en un PMU para prevenir posibles hechos de violencia.
Los dos equipos se refirieron esa misma noche a lo que pasó. En primer lugar, Santa Fe emitió un comunicado al final del compromiso. “Hemos dado poder para que una oficina de abogados se constituya en parte civil dentro del proceso, que se adelante contra las personas capturadas, y que se vean comprometidos en la tentativa de homicidio contra uno de nuestros hinchas. Rechazamos cualquier tipo violencia dentro y fuera de los estadios, debemos vivir el fútbol en paz”, escribieron en la misiva.
Atlético Nacional se unió al rechazo a través de sus medios oficiales. “Atlético Nacional rechaza y lamenta profundamente los actos de violencia ocurridos hoy en el Estadio Nemesio Camacho El Campín. Todo nuestro apoyo hacia los afectados y cero tolerancia hacia los violentos. Soñamos con un fútbol en paz y en familia, y enfocaremos nuestros esfuerzos en esa dirección para que lo que hoy vivimos no se repita jamás”, explicaron en un comunicado.