La Procuraduría General de la Nación llamó a juicio disciplinario a siete militares por presunta omisión de funciones durante el atentado con carro bomba a la Brigada 30 del Ejército, que se registró en junio pasado en la ciudad de Cúcuta.
Entre los llamados a juicio disciplinario se encuentran dos coroneles, un teniente coronel, un mayor, dos sargentos y un cabo.
Los hechos ocurrieron sobre las 3:00 de la tarde del 15 de junio, cuando, dentro de la unidad militar, se presentaron dos fuertes explosiones que dejaron 36 personas heridas, dos de ellas de gravedad.
Un día más tarde, el comandante de las Fuerzas Militares, general Luis Fernando Navarro, indicó que por el atentado se tomó la decisión de relevar de sus cargos a varios oficiales y personal de la guardia mientras se avanzaba en las investigaciones por lo ocurrido.
Fueron relevados de sus cargos el personal de los servicios de la guardia, el oficial de operaciones, el ejecutivo y segundo comandante y el comandante del batallón de apoyo de servicios para el combate número 30.
Capturados por el caso
Cabe recordar que en julio pasado fueron enviados a la cárcel el capitán en retiro Carlos Medina, su padre, un escolta y cuatro personas más, quienes están implicados en el caso.
Luego de que la Fiscalía les imputó los delitos de terrorismo, tentativa de homicidio en 41 personas, concierto para delinquir, porte de armas de uso privativo de las Fuerzas Militares y daño en bien ajeno, un juez de Cúcuta concluyó que los capturados no solo representaban un peligro para la sociedad sino que existía un riesgo de fuga y podrían, de permanecer en libertad, afectar el normal desarrollo del proceso, de ahí que ordenó su reclusión en una cárcel.
La investigación de la Fiscalía señala que el capitán Medina se encontraba en el lugar de los hechos el pasado 15 de junio. Un video revelado en el proceso deja ver al oficial en retiro mientras sale de la guarnición militar minutos antes de la explosión y en los detalles de la investigación se estableció que fue el mismo capitán quien ingresó el vehículo usado en el atentado.
De Medina se sabe que fue piloto de helicóptero, que era lancero y paracaidista, que salió del Ejército con una resolución de discrecionalidad, además de que fue, al parecer, investigado por ofrecer salvoconductos para el porte de armas. “Cuando estuvo en el Ejército hizo exigentes cursos como los de lancero y paracaidista. También recibió entrenamiento como piloto de helicópteros Black Hawk, en Estados Unidos, en la casa matriz de estas aeronaves”, dijo una fuente a Semana.
Además del ataque terrorista en contra del Ejército y en la Brigada 30, la Fiscalía tendría evidencia que vincula al capitán Medina con el atentado al helicóptero en el que viajaba el presidente Iván Duque en un recorrido por el departamento de Norte de Santander. La evidencia dejaría al oficial en retiro como un aliado de grupos criminales que afectan la seguridad y el orden en esa zona del país.