¿Qué se estará preguntando María Isabel, hoy viernes 14 de abril a las 6:00 a. m. en SEMANA? Pues la pregunta y la opinión giran en torno a la insólita petición del canciller Álvaro Leiva al Consejo de Seguridad de la ONU.

Que consiste en que este envíe a Colombia una comisión internacional que investigue, a estas alturas de la vida y de los acontecimientos, el supuesto entrampamiento de alias Jesús Santrich, que, según Leyva, fue lo que condujo hace años a quien en varias oportunidades ha calificado como su amigo a apartarse del acuerdo de paz con el gobierno Santos y a regresar al narcotráfico y a la lucha armada.

El canciller Álvaro Leyva ante Consejo de Seguridad de la ONU | Foto: Cancillería

Y no al revés, como efectivamente sucedió, que fue Santrich quien fue pillado con las manos en la masa para el envío de cocaína a Estados Unidos vía el cartel de Sinaloa, detectada en un operativo conjunto de la DEA y de la Fiscalía. Las autoridades de los Estados Unidos han sido las primeras en negar que existió tal entrampamiento, y recordemos que Estados Unidos es miembro permanente de ese Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas en el cual se libran importantísimos pulsos geopolíticos entre potencias mundiales como Estados Unidos, Rusia, China, Francia y el Reino Unido.

La política internacional de la Cancillería ha ido ante el Consejo de Seguridad para que en medio de temas como la complicadísima guerra de Rusia en Ucrania, la amenaza nuclear iraní, por ejemplo, el órgano de las Naciones Unidas le abra espacio para ocuparse de un tema judicial colombiano, que además lo llevaría a realizar una polémica incursión calificable de parcial en los asuntos internos de Colombia y su separación de poderes.

Jesus Santrich fue un cabecilla de las disidencias de las Farc. | Foto: Guillermo Torres Reina

Por el contrario, si acaso lo que quedó pendiente en Colombia luego de la muerte de Santrich, y de todos los acontecimientos que condujeron a ello en Venezuela, es cómo influyó la demora de órganos judiciales, como la Corte Suprema y la propia JEP, en el hecho de que Santrich terminara fugándose para engrosar la licencia de las Farc en Venezuela al lado de Joan Márquez.

Junto a la insólita petición del canciller crecen los rumores de que las relaciones de Leyva con la embajadora de Colombia ante la ONU, la indígena arahuaca Leonor Zabaleta Torres, no son buenas. Tampoco con el embajador en Venezuela, Armando Benedetti, y también se rumora que el propio presidente Petro, hace meses, viene registrando cierta insatisfacción con las labores de Leyva frente a su cargo.

Presidente Gustavo Petro | Foto: Presidencia

Ahora está por verse si el Consejo de Seguridad de la ONU, con su enorme peso específico mundial en la geopolítica del planeta, le abre espacio a Leyva para que mande esa comisión internacional a Colombia a dirimir un episodio de política doméstica. Quizás con la disculpa de que la DEA ayudó en la investigación tras la cual actuaba el peligroso cartel de Sinaloa y que ha trasladado sus tentáculos al país.

Escuche aquí la segunda opinión de María Isabel del día de hoy:

¿Qué opina María Isabel? Se abren distancias entre ministros Prada y Corcho

Este es el nuevo capítulo de la reforma a la salud. Porque el ministro del Interior insiste en acoger las inquietudes de los partidos Liberal, Conservador y la U, mientras la de Salud insiste en que no lo hará. Entretanto, siguen creciendo las críticas: el expresidente Gaviria y ahora se endurece Efraín Cepeda. Si el martes entrante no se ha acogido la mayoría de las 133 proposiciones legislativas presentadas, los partidos votarán la reforma de la salud en contra.

A las 6:10 a. m., ¿qué estará opinando María Isabel, hoy viernes 14 de abril, en SEMANA? La opinión va por los lados de las últimas horas de la reforma a la salud, que literalmente pueden ser sus últimas horas

Porque siguen apartados tres importantes partidos políticos de su articulado, acompañados de las mismas preguntas. ¿Serán serios en imponer su posición a la reforma si no se incorporan al texto sus inquietudes? O ¿seguirá abierto del compás de espera para el aumento de su participación en el gobierno, caso en el cual no serían entonces las últimas horas de la reforma?

Carolina Corcho Ministra de Salud. | Foto: GUILLERMO TORRES

Por lo pronto, las relaciones con el Gobierno están varadas; alrededor de 133 proposiciones legislativas que han radicado los partidos para que sean discutidas en el debate. El más firme de su oposición ha sido el expresidente César Gaviria, al frente del Partido Liberal, que incluso ha elaborado un contraproyecto de ley que se tramitará ante la Comisión Séptima. Y que lo hará como reforma estatutaria, y no por la ordinaria, escogida por el Gobierno para ahorrarse varios debates.

Aunque opiniones muy serias crean que esa vida es inconstitucional y que en la Corte Constitucional, por lo tanto, en caso de ser aprobada, le esperaría un incierto futuro. A la férrea posición del presidente Gaviria se sumó en las últimas horas la del jefe del partido conservadores Efraín Cepeda, por fin, quien asegura que de las 133 proposiciones, la ministra Carolina Corcho solo ha acogido el 20 %, y que, por lo tanto, él no volverá a asistir a más reuniones para conciliar el tema.

De izquierda a derecha: Germán Vargas Lleras, líder del Partido Cambio Radical; Álvaro Uribe Vélez, líder del Partido Centro Democrático; Cesar Gaviria, director del Partido Liberal; y Dilian Francisca Toro, exgobernadora y directora del Partido de la U. Principales opositores de la reforma a la salud.

Al día de hoy es altamente improbable que la reforma de la salud cuente con los votos para su aprobación, y encima de todo por cuenta de esta contrarreforma de la salud crece una diferencia de posiciones entre el ministro del Interior, estadista Alfonso Prada, y la ministra Corcho, de Salud. Porque este fue quien salió a hacer público que la ministra había resuelto presentar oficialmente el articulado ante el Congreso sin el acuerdo con los partidos. De espaldas del propio ministro del Interior, pero con la firma de dos calanchines: uno liberal y otro de La U que se levantó la señora Corcho para firmar la ponencia.

Ministro del Interior Alfonso Prada | Foto: Presidencia

El segundo round de esta diferencia de opiniones entre minInterior y minSalud se ha creado a raíz de que según Prada las inquietudes de los partidos serán todas acogidas. Mientras que Corcho dice que no.

El hecho es que, según los partidos, si estas inquietudes no se resuelven de aquí al martes, votarán negativamente la reforma. Quién sabe, sin embargo, si estas dificultades favorecerán a la nueva reforma del gobierno que pasa al tablero: la reforma laboral. ¿Será que ante las controversias que ya se avecinan los partidos se mostrarán más blandos? O ¿será que la coalición del Gobierno en el Congreso avanza a hacia su desmorone total?

Porque la pregunta que queda es, ¿por qué si los partidos de la coalición tiene tantas proposiciones inatendidas por el texto actual de la reforma la salud, tema vital para los colombianos, insisten en mantenerse en su estatus de partidos independientes en lugar de declararse más bien partidos de oposición?, ¿no sería esto más coherente?