A las 6:10 a. m., ¿qué estará opinando María Isabel, hoy jueves 2 de noviembre, en SEMANA? Pues la opinión gira en torno a la confusa pelea ya no entre Hamás e Israel que desde luego continúa, sino entre Cruz Verde y la EPS Sanitas que tiene varias cosas como digo, extrañas, porque la noticia explotó por los lados de los medicamentos que no va a surtir Cruz Verde a Sanitas que resulta que son apenas una pequeñísima fracción de los que sí va a seguir repartiendo de manera normal Cruz Verde.
Y son los que no van a repartir los más complejos, los que corresponden a enfermedades de alta complejidad, que son apenas 33.000 usuarios de los más de 7 millones de afiliados que tiene la EPS Sanitas.
¿Por qué entonces la noticia fue inflada por el lado negativo y que habría podido tener más bien una discusión interna entre las dos partes interesadas y el Gobierno como primera medida? Pero no, se intentó crear pánico entre los colombianos.
¿Será que todo fue manipulado para que aumente el apoyo popular a las necesidades impulsar la reforma de la salud que cursan el Congreso? Pero que contrariamente ayer quedó nuevamente estancada en la sesión correspondiente de la Cámara de Representantes por una falta de fórum.
O al revés, que las EPS, como cree el Gobierno, están presionando para que la nación se ponga el día y hasta se aumenten las contribuciones del Estado por paciente. Tampoco tiene nada de raro que ante el manejo de Sanitas, terminen cambiando de proveedor de medicamentos, porque lo que es verdad es que este incidente ha provocado insólitas declaraciones del desde el presidente para abajo.
Según Petro, Sanitas está “popocha”, le alcanza la plata para todo menos para pagarle a la Cruz Verde por los medicamentos que le debe surtir, y, según el ministro de Salud, Sanitas es una de las EPS que más recibe recursos del Estado, pero a su vez la que más deudas tiene con hospitales y clínicas.
Lo cual es lógico, porque es una de las EPS más grandes y si el Gobierno no paga a tiempo o no compensa lo que cuesta atender a cada paciente, pues no alcanza la plata.