La medida de casa por cárcel o detención domiciliaria es fuertemente cuestionada por la ciudadanía, que se pregunta si los delincuentes que obtienen este beneficio sí cumplen, al pie de la letra, con las restricciones establecidas por la justicia para estos casos.

Constantemente las autoridades realizan operativos de rutina y sorprenden a personas infringiendo la condena establecida; así mismo, cuando la Policía acude a los domicilios para verificar que los presos estén cumpliendo con lo ordenado por los jueces, se sorprenden al constatar que se encuentran fuera de ellos.

Precisamente uno de estos casos se dio en las últimas horas en el sur de Bogotá, cuando Jorge Eliécer Cardozo Campos, queriendo burlar la medida de aseguramiento domiciliario, utilizó la cédula de su hermano para poder salir a la calle.

Al ser requerido por las autoridades en el sector de Meissen, en Ciudad Bolívar, la Policía procedió a detenerlo, pues el número de cédula que presentó Cardozo y que correspondía a su pariente registraba deudas con la justicia.

En medio del traslado, el sujeto, quien desconocía qué delito había cometido su hermano, decidió confesar que había utilizado un documento que no era de él y que se encontraba violando la medida de detención domiciliaria.

Pese a su confesión, el hombre fue conducido a las instalaciones de la URI Molinos, donde las autoridades comenzaron su proceso de judicialización.

Inseguridad en Bogotá se disparó

Pese a los operativos que realizan las autoridades y donde se dan capturas como la de Cardozo, los hechos de inseguridad siguen estando a la orden del día, tanto así que las más recientes cifras de delitos en la capital muestran un incremento.

De acuerdo con el concejal de Bogotá, por el partido Colombia Justa Libres, Emel Rojas, la ciudad está padeciendo una fuerte ola de hurtos que están generando un grave deterioro de la seguridad.

“Lamentamos que el hurto a bicicletas, sobre el cual se había logrado una importante reducción, se haya vuelto a incrementar en un 22,5 % durante el mes de septiembre. En tan solo el mes pasado se hurtaron en la ciudad 854 bicicletas, de las cuales 80 fueron con arma de fuego y 241 con arma blanca”, señaló Rojas.

Estas cifras ponen en evidencia que en promedio en Bogotá, durante septiembre, se robaron 28 bicicletas por día. Una cifra escandalosa.

También reveló el cabildante que el hurto a celulares sigue en su frenético ascenso en la ciudad. “El hurto de celulares creció un 34 % durante el mes de septiembre; esto se suma al incremento sostenido del 8,7 % de todo el año”, dijo.

Según lo explicó Rojas, “en total se hurtaron 6.889 celulares en septiembre y en lo que va corrido de 2022 llevamos 45.937. Las UPZ de San Isidro-Patios, Gran Britalia, Las Nieves y Galerías son de las más afectadas”. De esta manera, en septiembre se reportaron 230 hurtos de celulares por día.

Así mismo, el hurto a personas es uno de los delitos de alto impacto con mayor crecimiento en Bogotá, el concejal Rojas señaló que estamos ante una oleada de hurtos en la cual el Distrito no ha podido dar una respuesta efectiva.

“41,3 % creció el hurto a personas en septiembre de 2022 y 16,1 % ha crecido en promedio en lo corrido del año. 13.237 hurtos se presentaron en solo un mes y 89.577 se han presentado en 2022. Además, es muy preocupante que 1.353 de esos hechos se hayan realizado con arma de fuego en la ciudad”, puntualizó Rojas.

El concejal de Colombia Justas Libres, quien hace un exhaustivo seguimiento a las cifras de inseguridad en Bogotá a nivel estadístico y en el territorio, le solicitará al secretario de Seguridad, en medio de un debate de control político citado, que se cree un plan especial para combatir el hurto en 10 UPZ de la ciudad donde se está concentrando gran parte de estos hechos. Estas corresponden a Guaymaral, El Prado, Las Cruces, Las Nieves, Las Margaritas, Britalia, Fontibón San Pablo, UPR Río Tunjuelo y parque El Salitre, donde durante todo 2022 se han venido presentando varios de estos flagelos de forma constante.