Luego de la noticia que se conoció en las últimas horas sobre la orden de un juez de la República de enviar a la condenada por corrupción electoral Aida Merlano a una guarnición militar, el ministro de la Defensa, Iván Velásquez, dijo que la reclusión de civiles en guarniciones militares no es lo deseable y desvía la misión institucional de la fuerza.
“Siempre lo deseable es que las cárceles sean los centros de privación de libertad para todas las personas que se les decreta privación intramural y allá tenemos que llegar, pero hay unas realidades objetivas de hoy, y frente a esas realidades objetivas de hoy, en determinadas circunstancias y con determinadas personas y casos muy especiales, es necesario para su protección y para la garantía de sus vías que sean recluidas en unidades militares que nosotros acatamos esas decisiones judiciales”, señaló el Ministro de Defensa.
Corte fijó en tiempo récord nueva fecha para escucharla en versión libre
Para el próximo miércoles 26 de abril quedó reprogramada la versión libre de la excongresista Aida Merlano Rebolledo en la investigación que se le adelanta por presuntamente haberle dado 5 mil millones de pesos al candidato a la Cámara de Representantes Emeterio José Montes de Castro. La diligencia que se tenía programada para este jueves se suspendió a última hora porque la exrepresentante a la Cámara, quien se encuentra en la cárcel El Buen Pastor de Bogotá, alegó problemas de salud.
Este caso tiene relación con una denuncia presentada en contra de Merlano Rebolledo por presuntamente entregarle directamente cerca de cinco mil millones de pesos al candidato la Cámara de Representantes, Emeterio José Montes de Castro. Este dinero habría sido girado por el empresario barranquillero Julio Gerlein, uno de los principales financiadores de la ascendente carrera política de Merlano.
En la denuncia se señala que este dinero fue utilizado para la compra de votos en la Costa en los comicios del 11 de marzo de 2018. En la queja se advertía que el día de las elecciones se puso en marcha un sofisticado plan para atraer personas para que votaran a favor de Merlano y de Montes, todo esto a cambio de una suma de dinero y un refrigerio.
Merlano, quien fue deportada desde Venezuela a Colombia el pasado 10 de marzo, ya tiene dos condenas por la compra de votos que puso en macha para dar el gran salto de la Cámara de Representantes al Senado: la primera sentencia es de 15 años de prisión por liderar la compra de votos; y la segunda, de cinco años y medio, por superar, ampliamente, los topes electorales fijados por la ley.
Igualmente, tiene una imputación de cargos pendiente para el próximo lunes 17 de abril por la cinematográfica fuga que protagonizó el primero de octubre de 2019 después de asistir a un centro médico ubicado en la calle 116 con carrera Séptima, en el nororiente de Bogotá, para que reanudara una sesión del diseño de sonrisa.