El caso de los sobrecostos en los multimillonarios contratos de la Refinería de Cartagena (Reficar), destapado por la Contraloría, tiene visos de ser el mayor escándalo de corrupción en el país. Por eso, el presidente Juan Manuel Santos exigió a los organismos de control “total contundencia” para llegar al fondo de esta olla podrida que precisamente se destapó en su gobierno.“Soy el más interesado en llegar al fondo de este asunto de Reficar. Si uno mira las cifras, la población colombiana quedó muy impresionada. Sobrecostos de estas magnitudes no tienen justificación alguna”, aseguró el mandatario.  Sin embargo, el presidente Santos pidió esto haciendo una claridad. “El origen, el pecado original de todo esto, sucedió en el gobierno anterior. Eso no tiene que ver con mi gobierno”.Pese a ello, el Jefe del Estado indicó que si llegado el caso, algún funcionario de su administración está involucrado en los sobrecostos para la ampliación de la refinería, le debe caer todo el peso de la ley. “En eso no hay ningún tipo de contemplaciones, y que se llegue hasta el fondo de este asunto”.Las palabras de Santos cayeron muy mal en Uribe, quien no dudó en reaccionar. Tildó de cínicos al mandatario y a los funcionarios del actual gobierno: “exministros y exdirectores de Ecopetrol contestarán el cinismo de Santos que manejó cinco años a Reficar y viene a culpar a nuestro gobierno”. Luego en su cuenta de twitter afirmó: “Santos hizo fiestas con inauguración de Reficar y sale a lavarse las manos con nuestro gobierno”.Uno de los escuderos del expresidente, el senador Ernesto Macías, también le respondió a Santos. Dijo que el Gobierno busca “desviar la atención” con el objetivo de “tapar” las anomalías que, en su criterio, sucedieron en el actual gobierno. Anunció un  debate en el Senado para demostrar que los sobrecostos se produjeron en la administración de Santos y no en la de Uribe. Reficar se convierte en un nuevo choque entre santistas y uribistas. ¿Quiénes son los directivos investigados por caso Reficar?Aunque la Contraloría ha sido el organismo estatal que más se ha referido a los sobrecostos en la megaobra en las instalaciones de Reficar en Cartagena (Bolívar) este año, la Procuraduría fue la primera en tomar decisiones por estos hechos. Desde febrero del 2015 abrió investigación formal a 12 directivos y exdirectivos petroleros que podrían tener algún grado de responsabilidad en el probable detrimento patrimonial.Desde entonces, el Ministerio Público ha venido recopilando pruebas para tratar de establecer si alguno de esos servidores fue responsable de un presunto sobrecosto cercano a 1.500 millones de dólares.En el 2014 el entonces ministro de Hacienda, Juan Carlos Echeverry, presentó una queja disciplinaria ante la Procuraduría por probables sobrecostos en obras de infraestructura que se venían adelantando en Reficar. Para él, gran parte de los gastos no contaba con la debida justificación.Aunque al Ministerio Público le tomó algunos meses establecer quiénes eran los responsables de la gestión contractual, en febrero del 2015 abrió investigación formal contra 12 personas, entre ellas el presidente de Reficar, Reyes Reinoso, y el expresidente de Ecopetrol Javier Gutiérrez.Para Ecopetrol, Reinoso era una prenda de garantía para lograr la modernización de la refinería. Su experiencia de más de 30 años en la ejecución de megaproyectos de refinación de petróleos en Estados Unidos y Venezuela convenció a los directivos de que su nombramiento ofrecía cierta confianza hacia la puesta en marcha del proyecto en Cartagena.La fama bien ganada del ingeniero venezolano contaba, entre otros logros, cómo sus prácticas generaron un aumento de efectividad del 82 % en el funcionamiento de los equipos rotativos del refinador de Paraguaná (En el occidente de Venezuela), que es el más grande del mundo.Al parecer, la llegada de un hombre con tantos pergaminos no fue suficiente para blindar el proyecto. Al menos así lo demuestra la queja de Echeverry, que dio sus primeros frutos hace exactamente un año. Desde entonces, la Procuraduría tiene la mira puesta sobre el ingeniero Reinoso y sobre otras 11 personas, siendo la más visible el expresidente de Ecopetrol Javier Gutiérrez Pemberthy.La gestión de este ingeniero civil de la Universidad de Los Andes en Ecopterol fue tan destacada, que fue mencionado por la revista Foreign Policy como uno de los 500 hombres más poderosos del planeta. Y no es para menos, si se tiene en cuenta que la empresa a su cargo llegó a ser la más importante de América Latina y la número 114 en el mundo.Hasta ahora, no existe en el mundo empresarial un solo reparo sobre las actuaciones de Gutiérrez. Los elogios que recibió su presidencia hacen pensar que difícilmente el Ministerio Público pueda encontrar en él alguna actuación indecorosa. Sin embargo, ese prestigio no será suficiente si no logra probar que su participación en esta gestión contractual no fue causante de ninguna de las irregularidades que han avizorado los organismos de control.Otro de los investigados es el actual embajador de Colombia en Chile, Álvaro Mauricio Echeverry Gutiérrez, quien fue vicepresidente jurídico de Ecopetrol. También se incluyó en el expediente al gerente de la refinería de Barrancabermeja y vicepresidente encargado de refinación, Orlando Díaz Montoya; al exvicepresidente de refinación Federico Maya Molina; al gerente de refinados, Luis Sanabria Chacón; al exrepresentante legal suplente y ex vicepresidente de refinación Pedro Rosales Navarro, y a la gerente de Ecopetrol América, Adriana Echeverry Gutiérrez.El proceso formal que abrió la Procuraduría recae además sobre el vicepresidente de Reficar, Felipe Laverde Concha, así como en contra de Diana Constanza Calixto y Jaime Flórez Muñoz, quienes fueron suplentes de los integrantes de la junta directiva de la firma.