El registrador nacional, Hernán Penagos, informó que ante los desmanes que se presentaron en la final de la Copa Betplay en el estadio Pascual Guerrero, en Cali, se implementará una nueva herramienta en el estadio de Ibagué y Medellín, para evitar que esto se repita en la final de Liga Betplay.
“Ante los penosos hechos ocurridos el pasado fin de semana en el estadio Pascual Guerrero de la ciudad de Cali, la Registraduría ha puesto a disposición de la Policía Nacional cerca de 300 equipos que van a permitir verificar la identidad de los hinchas que ingresen al estadio en la ciudad de Ibagué el próximo viernes”, aseguró el registrador nacional.
Según dijo, se trata de un trabajo en conjunto con la Policía Nacional para buscar persuadir a las personas que quieran cometer actos vandálicos, pero también se busca garantizar la seguridad de los hinchas que quieren ver la final del fútbol profesional colombiano.
Desde la Registraduría dijeron que se pusieron a disposición de la Policía 282 licencias para la aplicación de verificación de la identidad, la cual utiliza biometría facial, con el objetivo de confirmar en tiempo real el rostro de la persona y así poder identificarla más fácilmente.
Según Penagos, esta tecnología no solo será implementada para las finales del fútbol profesional colombiano, sino que podría ser una estrategia de cara a la entrada a los estadios para disfrutar de los partidos y mantener la seguridad en estos espacios.
“Ponemos a disposición de las autoridades del Tolima este sistema para la autenticación biométrica facial de los ciudadanos. Se trata de un trabajo mancomunado para combatir la criminalidad y estamos seguros de que esta herramienta contribuirá significativamente a mejorar los índices de seguridad ciudadana, no solo en los escenarios deportivos, sino en todo el departamento”, agregó el registrador nacional.
Con esta tecnología se podrá escanear la cédula en su versión física y digital mediante códigos QR o MZR, que están ubicados en la parte posterior del documento. Gracias a esta lectura es que se extraen datos biográficos del ciudadano para que, posteriormente, la Policía haga un cotejo facial mediante una captura fotográfica.
Desde la Registraduría aclararon que los datos recopilados se envían de manera segura a las bases de datos de la entidad para confirmar de quién se trata la persona en tiempo real.
Lo sucedido en el Pascual Guerrero, el pasado domingo 15 de diciembre, prendió las alarmas porque se volvió a vivir violencia por parte de las barras bravas. En algunas imágenes se vio cómo personas encapuchadas lanzaban vengalas con artefactos de gran calibre.