La eutanasia es un procedimiento médico por medio del cual se ocasiona la muerte de una persona de manera anticipada, con su consentimiento. Su reglamentación ha sido muy polémica y hasta ahora ha sido imposible su regulación en el país.
Sin embargo, en el Congreso una vez más se quiere intentar su aprobación y por eso este martes comenzó el trámite de un proyecto que busca reglamentarla. El objetivo es permitir el acceso de las personas a una muerte digna a través de la eutanasia. Sin embargo, en su discusión, como se esperaba, se presentó una fuerte controversia.
Previo a discutir la ponencia del autor y coordinador de la iniciativa, Juan Fernando Reyes Kuri, del Partido Liberal, un grupo de congresistas de derecha presentó una proposición para archivar el proyecto. Los firmantes fueron Buenaventura León, Juan Carlos Wills y Adriana Magali Matiz, del Partido Conservador; Jorge Burgos, de La U, y Edward Rodríguez, del Centro Democrático. Ellos argumentaban que se debía caer porque “el derecho a la vida es inviolable”.
“La eutanasia no significa otra cosa que muerte. Se le ha querido dar otro sentido, de muerte sin dolor a quienes sufren, pero ese es un sentido muy ambiguo (...) Al contrario, las sociedades y el Estado deben implementar políticas públicas para evitar los suicidios”, mencionó León.
Por su parte, Matiz agregó que si el principal argumento de los proponentes es que se pueda evitar el sufrimiento, para ello hay que buscar alternativas para aliviar el dolor y seguir una cultura del cuidado. “Lo que proponen es eliminar al enfermo, lo que proponen es la muerte”, afirmó.
En términos generales, este sector de carácter conservador considera que la eutanasia es un método que mata a la persona y que por ello se debería pensar en alternativas especialmente para las personas enfermas, que son quienes más buscan recurrir a este mecanismo. Consideran que esto va en contra de la naturaleza de la vida.
Sin embargo, los proponentes del proyecto y otros congresistas que lo respaldan consideran que es una decisión personal e intima que debe ser respetada por cada persona y su entorno familiar.
El representante José Daniel López, de Cambio Radical, contó una anécdota sobre el caso y mostró un carné que tiene desde hace varios años en el que identifica que preferiría recurrir a este procedimiento si sufre alguna enfermedad grave, irreversible o terminal en estado avanzado.
“Lo saqué junto a mis papás, en la Fundación Pro Derecho a Morir Dignamente, y dice al respaldo básicamente el espíritu del proyecto de ley. Este carné yo siempre lo cargaba en la billetera, mis papás aún hoy lo cargan, y expresa una voluntad que es individual y es del fuero más íntimo y más interno que puede haber en el ser humano”, afirmó.
Así mismo, Germán Navas Talero, del Polo Democrático, basó su argumentó en la etimología de la palabra. Recordó que esta proviene de “eu-thanatos” que significa “buena muerte”. “Yo contradigo de quienes hablan de inducción al suicidio”, dijo.
Navas continuó su relato diciendo que esta figura proviene desde la Antigua Grecia, en la que los soldados heridos pedían que los mataran porque no querían sufrir más. Navas también criticó el hecho de que el debate se lleve al ámbito religioso y moral.
Sobre esto, Margarita Restrepo, del Centro Democrático, mencionó: “Me llama mucho la atención cómo estigmatizan a las personas que profesamos una u otra religión (...). La verdad, no estoy de acuerdo con que uno deba avergonzarse de su religión, no soy católica vergonzante, soy orgullosamente católica y para mí la religión definitivamente va enlazada a un concepto de moralidad”.
La representante Juanita Goebertus, de la Alianza Verde, le respondió diciendo que Colombia es un Estado laico y que por ende se pueden profesar las creencias con libertad, pero que esta no debe ser establecida como la regla general y menos en una discusión legislativa.
Sobre el tema, el representante Gabriel Santos, del Centro Democrático, también mencionó que sus creencias son católicas, pero que estas no se pueden traer al recinto para discutir los proyectos. Dijo que apoyará la iniciativa de Kuri.
La representante Ángela María Robledo también intervino en el debate y se refirió a la dignidad humana diciendo que esta consiste en la capacidad de poder decidir con libertad sobre el proyecto de vida y sobre cómo morir. “La dignidad tiene que ver con ese mandato humano. Absolutamente respetable quienes tienen sus creencias morales y religiosas; nosotros también las tenemos, quienes nos paramos en el mundo desde una perspectiva ética y estética”, dijo la congresista de Colombia Humana.
La proposición para hundir el proyecto finalmente se cayó y Reyes Kuri pudo explicar su iniciativa. En esencia lo que busca es reglamentar la eutanasia a pesar de que en la Constitución ya se establece el derecho a morir dignamente y la Corte Constitucional la despenalizó hace varios años.
La proposición de la ponencia fue aprobada con 23 votos a favor y 9 en contra, por lo que el debate deberá continuar el jueves para definir si continúa su trámite en la plenaria de la Cámara o se hunde el proyecto.