En Vicky en SEMANA, la senadora Paloma Valencia dijo que la decisión de la JEP en contra de los excombatientes es muy preliminar, teniendo en cuenta que por el momento lo que se dio es una imputación y, por ende, aún no se ha resuelto nada.
Recalcó que el anuncio por parte de ese tribunal fue un poco demorado y que los congresistas de la FARC –ahora Partido Comunes– imputados por secuestro deben renunciar a sus curules. “Que dejen las curules inmediatamente, que nombren a otra gente de las ex-FARC que no sean responsables de delitos de lesa humanidad. Yo creo que hay un límite moral para una sociedad”, señaló.
La congresista del uribismo también dijo en SEMANA que le preocupaba la naturaleza de la verdad sobre los hechos, recalcando que la JEP está pidiendo a los ex-FARC que “digan que efectivamente ellos tuvieron como ley al interior de sus filas financiar el grupo terrorista con el secuestro extorsivo de colombianos”.
“Dos años para imputar un delito cuyas investigaciones ya había hecho la Fiscalía me parece largo y noto algunos aspectos que me preocupan. El primero es el hecho de que solo sean ocho personas, y cuando uno lee la imputación, es como ‘por haber establecido la política de secuestro como mecanismo de financiación de la organización’. Si ese es el delito, me pregunto: ¿Quiénes torturaron a los secuestrados? ¿Los enterraron vivos, los tuvieron en campos de concentración? ¿Esos no van a ser considerados máximos responsables?”, agregó Valencia.
No obstante, la senadora manifestó que le parecía alentador que les dieran a los excombatientes 30 días para que cuenten su verdad sobre los secuestros que se presentaron al interior de sus filas.
“Lo segundo es qué le va a pasar a Colombia cuando estamos diciendo que aquí hay al menos dos senadores que ya están catalogados como criminales de lesa humanidad. Entonces, Colombia empieza a ser de los países que tiene criminales de lesa humanidad como políticos. Yo creo que ahí hay un límite muy grave que siempre hemos planteado. Una cosa era la representación política frente a la cual yo tengo muchas dudas, pero otra es decir que la representación política queda, además, en manos de criminales de lesa humanidad que no han dicho la verdad, no han reparado a las víctimas, que no han pagado un solo día de cárcel”, señaló la senadora.
La congresista insistió en que no concibe que la JEP durante cuatro años no hubiera podido hablar con algunos excombatientes de las FARC sobre el delito de secuestro: “¿En serio fueron dos años para imputar un delito del que ya había hecho toda la investigación la Fiscalía?”.
Para Valencia, los procesos en la JEP deberían ir más rápido, antes de que no puedan ubicar a los excombatientes para que entreguen sus testimonios.
“Uno pensaría que las FARC ya hicieron millones de reconocimientos en términos de que muchos guerrilleros fueron y contaron qué fue lo que pasó, qué fue lo que hicieron, dónde torturaron, dónde enterraron, dónde desaparecieron los cuerpos. Pero aquí apenas están dando la orden de empezar a hacer el plan de acción”, explicó la senadora.
A su vez, la congresista del Centro Democrático aseguró que en últimas los excombatientes de las FARC solo tendrán que confesar ante la JEP aquello que les imputó y que aquello que no se investigó para implicarlos los exguerrilleros no lo tendrán que confesar. “Lo que dijo hábilmente esta negociación fue: bueno, ustedes confiesen, cuenten el crimen, nosotros los imputamos, los juzgamos, no les ponemos una sanción; porque la sanción va a ser: vayan y pidan perdón en un evento público y tómese una foto con las víctimas y cualquier cosa de ese estilo, no penas privativas de la libertad que quedaron explícitamente excluidas de las posibilidades sancionatorias. Y entonces ya, quedan juzgados y condenados”.