Luego de que el presidente de la República, Gustavo Petro, anunciara que se estableció un cese bilateral de hostilidades con el ELN, la Segunda Marquetalia, el Estado Mayor Central, las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC) y las Autodefensas de la Sierra Nevada. Las disidencias de las Farc-Ep dieron a conocer el por qué aceptaron este acuerdo.
A través de un comunicado, este grupo al margen de la ley aseguró que este pacto es, entre otras cosas, consecuencia de escuchar las necesidades de las comunidades víctimas del conflicto armado y la voluntad del gobierno Petro por reducir la violencia en el país.
“La llegada al cese bilateral del Fuego es el resultado, principalmente, del llamado de las comunidades y organizaciones sociales víctimas de las causas estructurales del conflicto social y armado y sus consecuencias; de la voluntad del Gobierno nacional, expresada en las acciones concretas de algunos de sus representantes para desescalar las confrontaciones”, indicaron las disidencias de las Farc-EP.
Así mismo, reconocieron que para poder cumplir con este cese al fuego, que va desde el 1 de enero hasta el 30 de junio de 2023, prorrogable según los avances en las negociaciones, se requiere de la participación de todos los sectores político-sociales como de las organizaciones internacionales.
“Requiere de la confluencia de todos y todas las colombianas que luchan por la paz y deseen participar activamente en el proceso y de una comunidad internacional que asume su papel y reconoce la importancia de la construcción de la paz en Colombia”.
Esto, según las disidencias, con el propósito de impedir que “los sectores guerreristas se impongan y saboteen como lo intentaron hacer durante la manifestación del cese unilateral del fuego”.
En esa misa línea indicaron que, este acuerdo es uno de los primeros pasos para tener justicia social y una democracia real en Colombia. “Ratificamos nuestro compromiso con las transformaciones estructurales que necesita Colombia (...) por lo cual, el cese bilateral del fuego representa un medio ante la crisis humanitaria y la posibilidad de avanzar formalmente en los diálogos con el Gobierno Nacional”, se lee en el comunicado.
Finalmente, las disidencias de las Farc manifestaron que desde la fecha atacaran el acuerdo y detendrán las acciones hostiles contra la Fuerza Pública. “Estaremos en nuestras áreas de la mano con los procesos sociales en función de organizar y dinamizar la construcción de una paz con justicia social. Respondemos ordenando a todas las estructuras, frentes, columnas y compañías, UTC y a la Milicia Bolivariana, cesar inmediatamente acciones hostiles contra la Fuerza Pública”.
Por su parte, el canal oficial de la presidencia indicó que el objetivo de este cese del fuego “será la suspensión de la afectación humanitaria de las comunidades étnico-territoriales y campesinas, y a la nación en general, suspender acciones ofensivas y evitar incidentes armados entre la fuerza pública y las organizaciones al margen de la ley con las que se acordó dicho cese”.
Según el Gobierno, esta decisión se toma porque ha recibido diferentes cartas de la sociedad civil y la Iglesia católica en la que se solicita el cese de la violencia, “las organizaciones con las que se han convenido el cese del fuego bilateral son ELN, Segunda Marquetalia, Estado Mayor Central, las AGC y Sierra Nevada”.
La Presidencia asegura que para el inicio de estos pactos de cese de violencia, “el Gobierno expedirá un decreto específico por cada una de las organizaciones, en dónde se determinará la duración y las condiciones de dicho cese del fuego”.