La pelea de los aforados que buscan tumbar las decisiones emitidas por la Corte Suprema de Justicia en los primeros meses del 2018 quedó a un peldaño de agotar todas las instancias judiciales en Colombia. La Sala Laboral dirimió este viernes el choque interno desatado al interior del máximo tribunal. Decidió mantener plenas las competencias de la Sala Penal para investigar y juzgar aforados hasta el momento en que entraron en funcionamiento las nuevas salas especiales que le dieron vida a la doble instancia.Puede leer: La férrea defensa que hace la Sala Penal de su facultad para juzgar aforadosEl último lío lo armó un fallo de la Sala Civil de la corte que decidió tumbar la sentencia a 25 años de cárcel contra el ex senador Martín Morales Diz. Este caso, uno de los más escandalosos del Congreso, tiene que ver con hechos de parapolítica y bacrimpolítica. El proceso quedó en el aire luego de que los civilistas consideraran que sus colegas de la penal habían perdido sus competencias de juzgamiento en enero del 2018, fecha en que se firmó el Acto Legislativo que creó la doble instancia para los congresistas, gobernadores y magistrados. El desbarajuste comenzó en enero de este año, cuando se firmó esta reforma constitucional sin incluir los artículos transitorios para que entrara a regir esa doble instancia. Es decir, le quitaba las competencias a la actual Sala Penal y dejaba en el aire el futuro de los procesos hasta que comenzaran a funcionar las nuevas salas especiales. En ese momento, la actual Sala Penal tuvo que pararse en la raya y sostuvo que era inconcebible que los aforados se quedaran "temporalmente sin juez". En el caso de Morales Diz aseguran que era inminente el vencimiento de términos y por ello no podía alargarse una decisión definitiva para una persona acusado de delitos tan graves, entre ellos, concierto para delinquir con fines de narcotráfico y tentativa de homicidio. El fallo de tutela resuelto por la Sala Civil desató un sensible choque de trenes que puso en duda la legitimidad de las decisiones adoptadas por el tribunal durante ese periodo. Incluyendo allí las sentencias contra el Ñoño Elías, Gustavo Moreno o Alejandro Lyons. Le recomendamos: Condenan al congresista Martín Morales Diz a 25 años de cárcelEl 21 de junio de este año, todas las dudas quedaron resueltas cuando salieron electos dos de los tres magistrados de la sala especial de primera instancia. Ramiro Alonso Marín Vásquez y Ariel Augusto Torres Rojas, una vez fueron posesionados, continuaron dando trámite a los procesos que estaban para fallo, entre estos, el del exmagistrado de la Corte Constitucional Jorge Pretelt o el del exgobernador de Antioquia Luis Alfredo Ramos. Ahora, el pronunciamiento de la Sala Laboral no solo revive la sentencia contra Morales Diz sino que deja esta pelea al borde de agotar todas las instancias internas. Si la Corte Constitucional selecciona la tutela del ex congresista del partido de La U podría llegar a dar su ultimátum en el asunto. Mientras tanto, otros procesos como el de Álvaro Uribe Vélez o Musa Besaile ya comenzaron a tocar las puertas de los tribunales internacionales, que seguramente se terminarán pronunciando sobre este, uno de los temas más controversiales para la justicia colombiana. En contexto: Tres congresistas entran al radar de la corte por el ‘ventilador‘ de Moreno