Luego de un fallo expedido por el Tribunal Administrativo de Cundinamarca el pasado 5 de diciembre, se esperaba que este miércoles fuera el día definitivo de la revocatoria al alcalde Enrique Peñalosa en el Consejo Nacional Electoral (CNE). La decisión obligaba a que la autoridad electoral tomara una decisión en máximo 10 días y, por eso, estaba previsto que saliera humo blanco de la reunión de los magistrados. Sin embargo, cuando los consejeros se disponían a discutir la ponencia del magistrado Emiliano Rivera, que plantea presuntas irregularidades en la financiación de la revocatoria, llegaron tres recusaciones: una contra él mismo y las otras contra sus colegas Armando Novoa y Gloria Inés Gómez. Entonces les cambió la agenda, pues para que puedan votar es necesario que los magistrados resuelvan los alegatos contra sus colegas. Las recusaciones contra Rivera y Gómez se resolvieron rápido. El CNE las rechazó. Sin embargo, en el trámite de Novoa no pudieron ponerse de acuerdo. Cinco magistrados votaron rechazándolas y otros tres aceptándolas, y para que hubiera una decisión, eran necesarios 6 votos. Ahora se espera que la semana entrante el tribunal electoral sortee a los conjueces que, ante la imposiblididad de que los titulares del CNE resuelvan, tendrán que decidir si aceptan o no la recusación contra Novoa. Hasta entonces, el proceso sigue en el limbo.En contexto: Revocatoria de Peñalosa, seis meses frenada en el CNEEn la recusación que llegó este miércoles contra Novoa, la ciudadana María Luisa Maldonado indica que cuatro funcionarios que trabajan en el despacho de ese magistrado firmaron los formularios del Comité Unidos Revocamos a Peñalosa, con lo cual, supuestamente, violan la norma que les prohíbe a los servidores de organismos electorales tomar parte en las controversias de su competencia. Además, dice la recusación, "es de público conocimiento que la revocatoria es liderada por Gustavo Petro" y en el equipo de Novoa también está Mary Luz Herrán, "quien se autodenomina exesposa de Gustavo Petro". Esos fueron los argumentos analizados por la Sala Plena del CNE para decidir si Novoa podía seguir siendo parte decisoria sobre la revocatoria. No es la primera vez que las recusaciones atrasan una decisión que ya lleva seis meses frenada en ese organismo electoral. De hecho, el Tribunal Administrativo de Cundinamarca le ordenó al CNE el martes pasado que en un plazo de 48 resolviera otras cuatro recusaciones que estaban en estudio.El Consejo acató la orden, pero cuando el camino ya parecía despejado para votar la ponencia de Rivera, aparecieron los nuevos alegatos. En ese proyecto, el magistrado pide que se investigue al comité Unidos Revocamos a Peñalosa por presuntas irregularidades en la financiación de la recolección de firmas de la revocatoria, que ya fueron avaladas por la Registraduría. En contexto: La ponencia que pone a tambalear la revocatoria de PeñalosaEn junio pasado, el Fondo de Financiación Política del CNE emitió un informe evidenciando supuestas faltas de certificados, facturas y la presunta violación en los topes de las donaciones. Hace tres meses, el Comité presentó los documentos con los que esperaban subsanar las irregularidades señaladas. De ser aprobada esa ponencia, la revocatoria no recibiría el aval de su contabilidad, un requisito obligatorio para que el presidente de la república convoque a las urnas donde se definiría la continuidad o la salida de Peñalosa del Palacio Liévano. Con los movimientos de este miércoles en el CNE, el futuro de la revocatoria recibe una nueva prórroga. Sin embargo, se estima que esta no podría ser muy larga, pues en el fallo del Tribunal Administrativo de Cundinamarca hay un regaño expreso contra la autoridad electoral porque este proceso se ha movido a pasos de elefante. Ahora se espera que en las próximas semanas se decida la recusación de Novoa y se vote la ponencia de Rivera que, según los rumores, recibiría el apoyo de la mayoría de los magistrados del CNE.