De no creer resulta la iniciativa que se analiza en el Instituto Nacional Penitenciario (Inpec) para luchar contra la extorsión carcelaria. De acuerdo con el director de la entidad, el coronel Daniel Gutiérrez, se plantea regular las llamadas a celular desde las cárceles, incluso, se analiza la posibilidad de crear “salas de comunicaciones” en los centros penitenciarios.
El director del Inpec aseguró que la posibilidad, un proyecto a futuro, de regular las comunicaciones en el interior de las cárceles tiene varios objetivos, no solo garantizar el arraigo de los privados de la libertad con sus familias, sino evitar la cantidad de multas en contra del Inpec por cuenta de los inhibidores de señal que terminan afectando las comunicaciones de los vecinos a las cárceles.
“A través de todo lo que se ha venido presentando a largo de los años, que no ha funcionado, como los inhibidores de señal y demás. Entonces ese sería como una iniciativa, como un cambio en la estrategia, pero hay que revisar si efectivamente se puede hacer todo pensando en esas dos variables: la humanización y la seguridad”, señaló el coronel Gutiérrez en diálogo con SEMANA.
El director del Inpec fue enfático en advertir que no se trata de legalizar el uso de los celulares en los centros penitenciarios, sino de buscar alternativas que ayuden a combatir la extorsión carcelaria, sin que se afecte al resto de los ciudadanos que viven en los alrededores de las cárceles y que terminan víctimas de los inhibidores de señal.
“Pero también que no vaya a afectar la Seguridad Ciudadana de todos los colombianos, entonces, es de esa manera, muy general, que lo estamos trabajando. Habrá que sentarse en mesas de trabajo con los ministerios de justicia y de las TIC, seguramente con el Congreso y todos los entes para poder determinar la regulación”, señaló el oficial en diálogo con SEMANA.
La polémica propuesta que surge ahora con la posibilidad de crear unas salas de comunicaciones para que los privados de la libertad puedan usarlas y hablar con cierto grupo de contactos, se suma a otras como permitir que los internos, en determinados delitos, puedan salir durante el día y regresar en la noche a la cárcel.
De acuerdo con el coronel Gutiérrez, la estrategia parte de la base o la misma dinámica que se utiliza para las visitas en los centros de reclusión, donde los internos tienen que pasar un listado de las personas que podrían visitarlos y solo ellos son los que ingresan a las cárceles. De esta forma y con este listado de contactos, los privados de la libertad podrán hacer las llamadas.
Humanización de las penas
Como parte de las reformas que plantea el Gobierno nacional, a través del Ministerio de Justicia, hay un proyecto de ley que se conoce como de humanización de las penas, que además de otorgar beneficios a condenados por delitos de lesa humanidad, plantea la eliminación de ciertas conductas que están en el código penal.
Ese proyecto respaldado por el ministro Néstor Osuna, fue duramente criticado por el fiscal general Francisco Barbosa, al advertir que es una intento de amnistía a narcotraficantes que quieren disfrazar de campesinos. El jefe del ente acusador aseguró que un parágrafo en ese proyecto le otorga beneficios a narcotraficantes puros, incluso a los encargados de toda la cadena de las drogas.
El fiscal también rechazó la posibilidad de eliminar los delitos como el incesto, la injuria y la inasistencia alimentaria, advirtió que de esta manera se deja a las víctimas sin la única posibilidad que tenían de exigir sus derechos. El ministro de justicia aseguró que revisarán los reparos presentados por el jefe del ente acusador.