La Dirección Técnica de Investigación de Accidentes de Colombia reveló este jueves, 2 de mayo, el informe provisional sobre el caso de la avioneta en la que viajaba la familia Mucutuy y que se accidentó el primero de mayo de 2023 en la selva del Guaviare.
La noticia en su momento fue mundial debido a la forma en la que los cuatro hermanos Mucutuy, un bebé y tres niñas, lograron sobrevivir durante 39 días en la selva, tras el trágico hecho en el que murieron su madre y otros dos adultos mayores, entre ellos el piloto de la aeronave Cessna U206C.
El documento recopila todo lo que ocurrió antes, durante y después del vuelo que finalmente terminó impactando contra varios árboles en la selva del Guaviare. Uno de los puntos que más ha llamado la atención son las últimas palabras que pronunció el piloto Hernando Murcia antes de chocar.
La aeronave despegó hacia las 7:03 de la mañana del primero de mayo del año anterior desde Araracuara y tenía como destino San José del Guaviare. Todo transcurría con normalidad hasta las 7:17 a. m., hora en la que el piloto da un primer aviso sobre una falla en el motor.
“Mayday, Mayday, Mayday, 2803, Mayday, Mayday, Mayday, tengo el motor en mínimas, voy a buscar un campo”, le informó al Control del Tráfico Aéreo (ATC).
De inmediato, se le indicó al capitán que cerca de la posición en la que se encontraba había dos pistas en las que podía aterrizar: el aeródromo de Morichal y el aeródromo de Miraflores. Además, el ATC informó de la emergencia a la Fuerza Aérea Colombiana y le hizo varios llamados al aviador, pero no hubo respuesta.
Minutos después, exactamente a las 7:32 a. m. el piloto volvió a pronunciarse señalando una aparente recuperación del motor. “2803 el motor volvió a coger potencia, estoy a 120 NM de San José, en ascenso para 8500 (...) 2803, seis personas a bordo, y autonomía para tres horas”, dijo.
Las últimas palabras del piloto
Todo cambió a las 7:43 de la mañana. El encargado de la aeronave se comunicó nuevamente con el ATC para reportar una nueva falla del motor.
“Mayday, Mayday, Mayday, 2803, 2803, el motor me volvió a fallar… voy a buscar un río… aquí tengo un río a la derecha. 103 millas fuera de San José… voy a acuatizar”, fueron las últimas palabras del piloto. Después de eso no se volvió a entablar comunicación alguna con la aeronave.
Pese a los repetidos llamados que se hicieron, nunca se recibió respuesta del piloto o alguna de las personas que iban a bordo. Diferentes entidades comenzaron las operaciones de búsqueda sobre el río Apaporis, ya que en un principio se iba a realizar un acuatizaje forzoso, pero el piloto no alcanzó y por ello decidió efectuar arborizaje sobre terreno selvático.
De acuerdo con el informe, aparentemente el avión se posó de manera controlada sobre los árboles y seguidamente se precipitó a tierra de manera vertical, lo que desencadenó daños sustanciales en la aeronave y lesiones mortales a los tres adultos mayores, mientras que los niños sufrieron heridas menores y, prácticamente desde ahí, inició su travesía.