Para el próximo viernes primero de marzo quedó programada la audiencia en la cual la Sala de Justicia y Paz, del Tribunal Superior de Bogotá, definirá la solicitud de libertad presentada por la defensa del excomandante paramilitar Salvatore Mancuso Gómez, quien llegó a Colombia deportado el pasado martes después de estar 15 años en una cárcel de los Estados Unidos cumpliendo una condena por delitos relacionados con el tráfico de drogas y concierto para delinquir.
Mancuso, mediante sus abogados, pidió el otorgamiento de la libertad condicional o a prueba. Por esto, la misma Sala ya le solicitó a la defensa del excomandante paramilitar y a todas las autoridades judiciales encargadas enviar información sobre los expedientes que cursan en contra del exjefe de las AUC.
Igualmente, se convocó a la Fiscalía y la Procuraduría General para que emitan sus respectivos conceptos frente a la solicitud de libertad presentada por el exjefe de los Bloques Norte y Montes de María de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC).
La Sala de Justicia y Paz entonces entrará a definir si Mancuso cumplió los compromisos pactados para aportar a la verdad, la reparación de las víctimas, no volver a delinquir tras su desmovilización en el año 2004. La defensa del excomandante paramilitar pidió tener en cuenta los años que estuvo privado de su libertad en los Estados Unidos.
En la actualidad, pesan cerca de 60 medidas de aseguramiento en contra del exjefe paramilitar por delitos relacionados con desapariciones forzadas, desplazamientos forzados, violencias basadas en género, reclutamientos ilícitos y otros crímenes de guerra, entre muchos otros.
En la noche del pasado martes, el exjefe paramilitar Salvatore Mancuso llegó a la cárcel La Picota en un helicóptero Black Hawk, según pudo confirmar SEMANA para ser recluido en el pabellón de extraditables y estará bajo estrictas condiciones, con el objetivo de preservar su vida al máximo. Mancuso permanecerá aislado en una celda de 3x4, aproximadamente.
“Está ubicada en el edificio o en la estructura donde está el pabellón de extraditables, custodiado por aproximadamente 64 funcionarios penitenciarios del Inpec. Es una guardia especial que hemos venido trabajando con la Embajada americana, que ha sido capacitada, entrenada, se le ha hecho polígrafo; son los encargados de custodiar y vigilar a todos los extraditables”, explicó el coronel Daniel Fernando Gutiérrez, director del Inpec.
Las condiciones de seguridad de Mancuso van a ser extremas, no solo será custodiado de forma permanente en su celda, sino que habrá un dispositivo “perimetral” para garantizar su seguridad y evitar cualquier intento de fuga, en el remoto caso de que lo pretendiera.
“Tenemos cinco filtros de seguridad para el acceso, eso va a permitir que haya controles más especiales y estrictos. También hay cinco filtros para el acceso, en los cuales únicamente va a tener ingreso el oficial del servicio y no va a tener acceso a otros guardias. Con respecto a la seguridad perimetral, hemos venido articulando en el marco de emergencia de cárceles penitenciarias el apoyo de la Policía Nacional. Eso ya lo vamos a tratar con más detalles, pero en este momento hay registros esporádicos por parte de la Policía en la parte perimetral”, agregó el funcionario.
La comida será otro de los aspectos en los que los guardas de seguridad tendrán gran vigilancia, especialmente con el objetivo de que el exjefe paramilitar no sea envenenado. “Hay unas instrucciones de seguridad frente a este tema y una posibilidad que renuncie a la alimentación que le da el Inpec y pueda tener unas condiciones especiales; un ingreso de comida no especial, pero bajo estrictas medidas de seguridad para evitar cualquier hecho que se pueda presentar frente al riesgo de su seguridad”, agregó el director del Inpec.
Por último, el coronel Gutiérrez indicó que hasta el momento no hubo ningún requerimiento por parte de la defensa del exparamilitar en lo relacionado con la comida u otros temas.