Se siguen conociendo más detalles de la manera como se planeó la explosión el pasado 15 de junio de una camioneta Toyota Fortuner blanca en las instalaciones de la Brigada 30 del Ejército en la ciudad de Cúcuta, que dejó como saldo 36 heridos y el temor por el ataque a la principal base militar en la zona del Catatumbo y la frontera con Venezuela.
En cámaras de seguridad de Cúcuta, cuyas imágenes fueron obtenidas por Noticias RCN, se observa que la camioneta Toyota Fortuner, que fue utilizada para el atentado terrorista, llegó el 4 de junio a un parqueadero que se encuentra ubicado en el barrio Teorama de esa ciudad. El automotor habría llegado hasta ese lugar, horas después de que fuera comprado.
En uno de los videos se observa que la camioneta ingresó al parqueadero a las 11 de la noche y de su interior se bajaron cuatro personas. Todo parece indicar que el automotor estaba siendo conducido por el capitán en retiro Andrés Fernando Medina.
Las otras personas que al parecer se bajaron de la camioneta esa noche serían Joaquín Medina, padre del capitán retirado; Ciro Alfonso Gutiérrez Ballesteros, quien trabajó en la Unidad Nacional de Protección (UNP) prestando servicios de escolta, y otra persona que las autoridades aún no han logrado identificar.
En otro de los videos obtenidos por Noticias RCN se observa cuando la camioneta se parqueó al frente de un local comercial y a Ciro Alfonso Gutiérrez custodiándola en una moto, mientras el automotor era de nuevo conducido por el excapitán Medina.
Luego, en una de las imágenes se aprecia a Gutiérrez portando su casco de motocicleta y a un costado de la camioneta hablando con alguien que estaba en su interior, al parecer el excapitán Medina, ultimando los detalles para el atentado en las instalaciones de Brigada 30 del Ejército.
Después, otra de las cámaras de seguridad ubicadas cerca al batallón en Cúcuta registró el momento en que Gutiérrez y Medina huyen del lugar en la moto que era conducida por este último, con destino a la frontera con Venezuela donde se fueron a esconder, hasta que las autoridades lograron capturarlos hace una semana.
La investigación de las autoridades indicó que al día siguiente la camioneta fue llevada hasta el municipio de Tibú, Norte de Santander, donde fue cargada con el material explosivo y la trajeron de regreso en la mañana del 15 de junio, lista para el atentado terrorista en la Brigada 30.
Una vez capturados y luego de la imputación de cargos que hizo la Fiscalía por los delitos de terrorismo, tentativa de homicidio en 41 personas, concierto para delinquir, porte de armas de uso privativo de las Fuerzas Militares y daño en bien ajeno, en contra del capitán en retiro Carlos Medina, su padre, un escolta y cuatro personas más, el fiscal especializado a cargo de la investigación solicitó a un juez de control de garantías que enviara a la cárcel a los capturados.
Como lo anticipó SEMANA, el juez de Cúcuta concluyó que los capturados no solo representan un peligro para la sociedad, sino que existe un riesgo de fuga y podrían, de permanecer en libertad, afectar el normal desarrollo del proceso, de ahí que ordenó su reclusión en una cárcel.
La investigación de la Fiscalía deja al capitán Medina en el lugar de los hechos, en la explosión del carro bomba en la Brigada 30 del Ejército el pasado 15 de junio. Un video revelado en el proceso deja ver al oficial en retiro mientras sale de la guarnición militar minutos antes de la explosión y en los detalles de la investigación se estableció que fue el mismo capitán quien ingresó el vehículo usado en el atentado.
De Medina se sabe que fue piloto de helicóptero, que era lancero y paracaidista, que salió del Ejército con una resolución de discrecionalidad, además de que fue, al parecer, investigado por ofrecer salvoconductos para el porte de armas. “Cuando estuvo en el Ejército hizo exigentes cursos como los de lancero y paracaidista. También recibió entrenamiento como piloto de helicópteros Black Hawk, en Estados Unidos, en la casa matriz de estas aeronaves”, dijo una fuente a SEMANA.
Además del ataque terrorista en contra del Ejército y en la Brigada 30, la Fiscalía tendría evidencia que vincula al excapitán Medina con el atentado al helicóptero en el que viajaba el presidente Iván Duque en un recorrido por el departamento de Norte de Santander. La evidencia dejaría al oficial en retiro como un aliado de grupos criminales que afectan la seguridad y el orden en esa zona del país.