El alcalde de Convención, en Norte de Santander, Dimar Barbosa Riobó, está desesperado porque su municipio podría vivir una situación similar a la que padeció Gramalote. Varias casas se encuentran en riesgo de derrumbe por lo que se cree sería una falla geológica.
Y aunque la situación pudo haberse desencadenado por una excavación, el mandatario convencionista es enfático en pedir que más que culpables, lo que urge es resolver la situación: “No es hora de buscar culpables, esto fue una combinación de factores que llevaron a esta tragedia donde ya hay siete familias que perdieron sus casas completamente, su patrimonio”.
Además de estas siete familias, otras más tuvieron que abandonar sus hogares por el riesgo de que la tierra siga cediendo. Ya son 35 hogares los que deberán hacer lo mismo, todos de los barrios La Primavera, La Cruz y Cataluña.
El alcalde dice que lleva días sin dormir pensando en cómo resolver la situación, pues es prudente al hacer la comparación, pero dimensiona un panorama similar al que vivió Gramalote, también en Norte de Santander, que tuvo que ser reubicado. Según los cálculos hechos hasta el momento, son entre 10 y 15 mil metros cúbicos de tierras y escombros los que cayeron sobre la parte baja. Se dimensiona que es una situación que afecta a cerca del 20 % de la zona urbana del municipio con pérdidas que pueden superar los dos mil millones de pesos.
Este miércoles, el alcalde se encuentra en Bogotá tocando las puertas de todas las entidades que puedan brindar ayuda en medio de la alerta que, aunque directamente tocó a algunos, se vuelve una tragedia de todos, como dice Cecilia Martínez, habitante del municipio, “somos un pueblo pequeño y todos nos conocemos”.
La visita a la capital, el mandatario la resume de esta manera: “Vine hasta Bogotá buscando ayuda en la Unidad Nacional del Gestión del Riesgo para que hagan presencia inmediata y urgente en el municipio. El tema de la remoción de escombros amenaza tres barrios en la parte de abajo. Necesitamos obras de mitigación urgentes e inmediatas, se necesitan obras para la estabilización del talud del barrio La Primavera, que es el barrio de arriba, el barrio del comercio y en el barrio El Cristo. Además de controlar tres casas que están a punto de caerse y se requiere que se puedan demoler de manera controlada”.
Barbosa Riobó también está pendiente de que de la Gobernación llegue apoyo para tratar de mitigar la alerta que hasta ahora no ha cobrado vidas humanas y solo deja pérdidas materiales.
La Unidad Nacional del Gestión del Riesgo le aseguró que haría presencia el viernes. “Nuestra urgencia es porque esto es una situación que no da espera”, comentó el alcalde, y más porque si continúan las lluvias la alerta puede ser mayor. Las familias que perdieron sus viviendas fueron ubicadas en albergues temporales.
Por ahora, desde la administración municipal son permanentes los llamados a la comunidad para que evite estar cerca de la zona donde se presentó la emergencia. Esta situación también sería un coletazo para el acceso vía terrestre a la región del Catatumbo, específicamente con el municipio de El Tarra.
Convención es un municipio que ha sufrido por los golpes del conflicto armado, por lo cual en la localidad se han priorizado Programas de Desarrollo con Enfoque Territorial (PDET) y Zonas más Afectados por el Conflicto (Zomac). Ahora su urgencia es resolver esta emergencia que los tiene angustiados. Por eso el alcalde insiste em que seguirá tocando puertas con urgencia en todas partes.