Han pasado cinco días desde que San Andrés entró en alerta por el inminente riesgo que representaba la formación de un huracán sobre el mar Caribe. Las autoridades departamentales dispusieron de sus planes de contingencia y se estableció un toque de queda y todo tipo de restricciones turísticas.
Este martes, 11 de octubre, la Dirección General Marítima (Dimar) informó que se reanudan las operaciones de embarcaciones mayores y menores tras el paso del sistema ciclónico por el archipiélago.
“Esta decisión se toma después del análisis y evaluación que funcionarios de Dimar adelantaron a las diferentes ayudas a la navegación que se encuentran en el canal de acceso a San Andrés, encontrando que se encuentran en buen estado y operativas, lo cual permite la navegación de forma segura a las embarcaciones de alto bordo y demás embarcaciones de recreo, deportiva y de pesca artesanal”, anunció la autoridad marítima.
Al parecer, el panorama meteorológico devela buenas condiciones. “Según el último comunicado emitido por el Centro de Investigaciones Oceanográficas e Hidrográficas del Caribe (CIOH), se evidencia el descenso progresivo de la altura de la ola en aguas abiertas con valores inferiores a los tres metros y en cercanías a las zonas costeras entre uno y 2,5 metros”, indicó la Dimar.
El huracán Julia llegó a San Andrés el sábado 8 de octubre. Tras su paso, dos personas resultaron lesionadas y 101 viviendas quedaron con afectaciones en su infraestructura, además de los daños eléctricos y la caída de árboles.
Hasta el momento, las autoridades no han confirmado si los balnearios se encuentran habilitados puesto que se encontraban en proceso de limpieza.
Los estragos de Julia
La tormenta Julia dejó en su paso por el norte de Centroamérica al menos 26 muertos y cuatro desaparecidos, principalmente en Guatemala y El Salvador, según datos oficiales.
En Guatemala, 14 personas murieron, ocho de ellas en el municipio indígena de Santa Eulalia, en el oeste del país, después de que se derrumbara su vivienda por un deslave.
Otros cinco miembros de una familia fallecieron por circunstancias similares en el municipio maya de Panzós (centro), en el que se reportó una persona desaparecida. Además, un soldado perdió la vida cuando realizaba tareas de apoyo en otra comunidad. En tanto, socorristas buscan a dos hombres que fueron arrastrados por el río Cahabón, en el norte de país.
El Salvador registra diez muertos, cinco de ellos soldados que murieron aplastados tras colapsar un muro donde se resguardaban del temporal, confirmó el Gobierno. El suceso se registró en Comasagua, a 30 km al suroeste de la capital.
Las autoridades informaron también de la muerte de dos personas soterradas tras el derrumbe de un muro que destruyó una vivienda en el poblado de Guatajiagua, unos 150 km al este de San Salvador, y el fallecimiento de otras dos en el departamento de Sonsonate (suroeste). En la periferia de la capital, un menor murió por otro derrumbe.
En Honduras, Wilmer Wood, alcalde de la localidad de Brus Laguna, en el departamento oriental de Gracias a Dios, reportó la muerte de dos personas tras naufragar una lancha por efecto del fuerte oleaje que dejó Julia, mientras otra persona se encuentra desaparecida.