La violencia contra la mujer continúa en Colombia. La semana pasada se conocieron dos casos de feminicidio en la ciudad de Bogotá, que dejaron como víctimas a Stefany Franco, de 32 años, y Natalia Vásquez, de 31 años, quienes fueron brutalmente asesinadas por sus exparejas sentimentales.

Esta vez, la nueva víctima tenía menos de tres años y respondía al nombre de Celeste; su presunto agresor sería su padrastro, quien ya fue capturado.

Los hechos tuvieron lugar el pasado viernes 31 de mayo en la localidad de Bosa. Según información preliminar, la niña fue llevada por un familiar al hospital de Kennedy y presentaba posibles signos de violencia física y sexual. Según los primeros reportes de las autoridades, al parecer, su abuela la llevaba en brazos después de ser trasladada en un taxi, el cual fue escoltado por la Policía de Tránsito para abrir paso entre los vehículos.

Lo lamentable del caso es que la pequeña llegó al centro hospitalario sin signos vitales, después de haber transcurrido 40 minutos desde el incidente. Los médicos que la atendieron notaron múltiples traumatismos en diferentes partes del cuerpo, lo que generó preocupación sobre las circunstancias que llevaron a su fallecimiento.

La menor de 3 años tiene signos de violencia. | Foto: Getty Images

Tras la violenta muerte de la menor, la Secretaría Distrital de Integración Social emitió un comunicado en el que lamenta el homicidio de Celeste y condena cualquier forma de violencia contra la mujer.

“La Secretaría Distrital de Integración Social lamenta el repudiable asesinato, el presunto hecho de violencia y abuso sexual, y las circunstancias del fallecimiento de Celeste, en un nuevo caso de violencia sistemática contra las niñas y los niños, y se solidariza con su familia, poniendo a su servicio la oferta institucional disponible y rechazando categóricamente cualquier tipo de violencia hacia ellos”, señalan.

El documento continúa explicando que, si bien la pequeña asistió a sus jardines durante 2022 y 2023, durante ese tiempo no se identificó ninguna señal de alerta que indicara que la niña estaba siendo víctima de algún tipo de violencia.

“La niña fue usuaria de uno de nuestros jardines durante los años 2022 y 2023. Lamentablemente, en 2024 no continuó y aunque se realizaron llamadas y visitas de seguimiento, en el mes de febrero se realizó el retiro por inasistencia. Durante su permanencia en el servicio no se identificó ni registró ninguna alerta o indicio de violencia hacia ella”, agregan.

Concepto de violencia doméstica y abuso infantil. | Foto: Getty Images

Además, enfatizan su interés y obligación como entidad de trabajar para garantizar la seguridad de todas las niñas y niños de la ciudad. Esto se logra mediante el fortalecimiento de mecanismos y rutas de diferentes entidades del gobierno distrital y nacional para identificar a tiempo signos de violencia sexual. Del mismo modo, se activan las rutas de atención necesarias para reducir los factores de riesgo con niños, niñas y adolescentes.

“Con la construcción del Plan de Desarrollo Distrital (PDD): Bogotá camina segura, y ante la escalada de este tipo de hechos violentos y de abuso sexual en particular, iniciamos esfuerzos contundentes para construir una vida libre de violencias, especialmente, en el contexto familiar y frente al abuso a niños, niñas y adolescentes (NNA)”, agregan.