Los planes criminales de algunos sectores de la primera línea siguen en ejecución, esta vez en Medellín, donde las autoridades están en máxima alerta porque ahora es la misma fuerza pública la que está bajo amenaza. Según conoció SEMANA en exclusiva, en interceptaciones telefónicas legales a miembros de esta organización estarían las pruebas del plan para secuestrar a un policía en el marco de las protestas del 20 de julio.

La información está en poder de Fiscalía y la advertencia ya la tiene el cuerpo de Policía. El mensaje es claro y lo hace un fiscal delegado contra organizaciones criminales. “Me permito informarles que a través del monitoreo de líneas interceptadas a los integrantes de la primera línea en el Valle de Aburrá, ha surgido información en el sentido de que estos sujetos pretenden el día de mañana secuestrar a un señor oficial de la policía nacional, para luego canjearlo por alguno de los detenidos en la protesta. Se desconoce lugar y que oficial sería, ya que solo hablan de esas intenciones”, señala el oficio en poder de SEMANA.

En el documento advierten que “lo anterior para que los señores oficiales estén atentos a movimientos extraños a su alrededor y sean prevenidos en sus movimientos y desplazamientos”. Y así es, las autoridades están en máxima alerta por las protestas, más ahora que conocen esta advertencia.

Aunque de las capitales del país Medellín es la que menos afectación y vandalismo ha sufrido en las protestas, hay alerta por posibles infiltraciones en la Primera Línea, por eso el alcalde Daniel Quintero pidió a los ciudadanos que no salgan a la jornada de protestas.

”Hacemos un llamado a la ciudadanía, para que esté atenta, para que nos den información, porque estos grupos criminales podrían actuar ya sea dejando artefactos explosivos, haciendo voladura de torres o colocación de símbolos en el territorio. Podrían infiltrar marchas, pacíficas o no, por eso mi recomendación es no salir a marchar, no exponer a los ciudadanos”, dijo el mandatario local.

La advertencia la hizo Quintero luego de conocer información relacionada con la posible injerencia de grupos subversivos o al margen de la ley, como el frente urbano del ELN, en algunas movilizaciones programadas para este 20 de julio.

La ciudad tiene dispuestos para la jornada más de 2.260 efectivos de la Policía y previo a las protestas, la Alcaldía de Medellín realizó un consejo de seguridad local y otro nacional y se estableció un Puesto de Mando Unificado (PMU).