La inseguridad es una de las mayores problemáticas que se registra en diferentes zonas del país. El departamento de Cundinamarca, ubicado al lado de Bogotá, no es la excepción y por eso durante los últimos años ha tenido que enfrentar diferentes retos en materia de seguridad.
Uno de los principales delitos que se presenta es el hurto, una situación que azota a otros departamentos y que más víctimas deja en el país. Según cifras oficiales del Observatorio de Seguridad y Convivencia Ciudadana de Cundinamarca, el hurto a personas es la principal problemática que ha golpeado a la población durante este año, entre el 1 de enero y el 31 de agosto se ha tenido un aumento del 25,8 %, lo que se traduce en 3.566 casos más con respecto al periodo en el año 2022.
No obstante, es importante resaltar que durante este mismo periodo se ha logrado una disminución en el hurto de bicicletas (35.6 %), hurto de celulares (29,3 %) y hurto en el comercio (35,5 %).
Por otra parte, en materia de homicidios también se ha registrado un leve aumento del 7 % en comparación con el mismo periodo antes mencionado. El observatorio destaca que la tasa de este delito es relativamente baja, 11 homicidios por cada 100.000 habitantes.
Asimismo, frente a los feminicidios, una de las principales problemáticas que se registra en Colombia y que llevó a que se declarara la emergencia nacional de género, el panorama es mucho mejor, ya que se ha notado una disminución del 33,3 %, misma situación que ocurre con los casos de violencia intrafamiliar, los cuales se han reducido hasta en un 20 %.
Por otro lado, el tema de microtráfico es otra de las actividades delictivas que se presentan en el departamento y que, desafortunadamente, ha venido creciendo en algunos municipios. Durante lo corrido del 2023, las autoridades han logrado incautar más de dos toneladas de marihuana, 29 kilos de bazuco, 921 kilos de cocaína y 159 kilos de base de coca.
El general (r) Juan Pablo Rodríguez, alto asesor y consejero de seguridad y convivencia de Cundinamarca, le dijo a SEMANA que ante este flagelo se han adelantado varios esfuerzos. Por un lado, se realizan acciones preventivas mediante el trabajo psicosocial y planes especiales en los entornos escolares, mientras que al tiempo también se adelantan acciones correctivas que permitan el desmantelamiento de las bandas dedicadas a esta actividad.
Estas acciones han dado grandes resultados, ya que la Policía de Cundinamarca y la Región de Policía Metropolitana de la Sabana han detectado por lo menos 59 bandas dedicadas a cometer actividades delictivas y se ha logrado la desarticulación de 32 de ellas.
Los municipios donde más se concentran los delitos
Un punto muy importante es que de los 17 delitos de alto impacto que se analizan en el Observatorio de Seguridad y Convivencia Ciudadana, 16 municipios aporten el 95 %, mientras que los otros 100 presentan cifras muy bajas. Estos lugares son: Soacha, Chía, Mosquera, Fusagasugá, Madrid, Funza, Facatativá, Girardot, Zipaquirá, Cajicá, Cota, Tocancipá, Ubaté, la Mesa, Sílbate y Villeta.
“Podemos decir que estos cuatro años han sido irregulares, marcados inicialmente por el desarrollo de la pandemia de la covid-19, que redujo la delincuencia producto de la cuarentena, pero que en 2021 y 2022 se disparó como respuesta de la apertura económica. Aunque en 2023 se ha logrado un descenso sostenido, gracias a la labor de las autoridades, a pesar del incremento de la población en general”, destaca el general (r) Rodríguez.
Otra cuestión importante ha sido la migración, pues es un factor que ha incidido en la comisión de ciertos delitos en el departamento. De acuerdo con el general (r) Rodríguez, algunos migrantes se han visto involucrados en actividades delictivas como hurto y sicariato.
Un claro ejemplo de esto es el municipio de La Mesa, sitio en el que en diferentes barrios se ha confirmado la presencia de migrantes en algunas bandas dedicadas a cometer actividades delictivas en contra de la población.
De vuelta a las cifras, otro punto fundamental ha sido lo relacionado con los delitos sexuales, especialmente cuando las víctimas son menores de edad. Sobre estos casos se ha logrado la disminución en un 30% durante los últimos tres años.
Más allá de la reducción en múltiples delitos, el alto asesor y consejero de seguridad y convivencia de Cundinamarca resaltó que se seguirán adelantando todas las acciones pertinentes para buscar que los actos delictivos sigan disminuyendo en todo el departamento. Para este objetivo, resaltó que es importante la colaboración de todos los habitantes.
“El llamado a toda la ciudadanía y la comunidad es no ser indiferentes ante el delito y la criminalidad, denunciar el mismo a las autoridades competentes, colaborar con la fuerza pública, mantenerse alerta y activos mediante mecanismos cívicos como los frentes de seguridad y gestores de seguridad, aplicar constantemente las medidas de autoprotección para evitar ser víctimas de la delincuencia y la criminalidad. En términos generales, aplicar constantemente una cultura de seguridad que nos beneficie a todos”, destacó el general (r) Rodríguez.