Colombia sigue teniendo el deshonroso título del mayor productor de cocaína del mundo. En 2022, se reportó que la producción alcanzó las 1.700 toneladas, lo que representaría un incremento del 13 % frente a 2021.
En las últimas horas, el presidente Gustavo Petro reportó que su gobierno había superado la meta de incautación de toneladas de cocaína de gobiernos anteriores, al pasar de 569 toneladas, entre enero y octubre de 2022, a 635 este año en el mismo periodo, para un incremento del 12 %.
Para el experto en temas de narcotráfico, el coronel retirado de la Policía Miguel Tunjano, es lógico que haya un incremento en el decomiso de las toneladas de cocaína si se tiene en cuenta que la producción del alcaloide ha aumentado, al igual que los cultivos ilícitos.
“Si lo comparan con octubre es posible que haya un leve aumento, pero eso es coincidente con la cantidad de cocaína que se está produciendo en el país. Entre más cultivos, hay más producción de cocaína y, por ejemplo, las incautaciones por lógica tienen que aumentarse”, dijo Tunjano.
Así mismo, recordó que para 2022 la producción de cocaína en el país creció un 30 % con respecto a 2021. “El incremento del potencial de producción fue 30 % con respecto al año 2021. Entonces uno esperaría que si el potencial de producción del año 2022 fue el 30 %, las incautaciones también aumentaran un 30 %”, dijo.
También manifestó que no se puede ver la batalla contra las drogas como una guerra perdida: “Pues no se podría decir que es una guerra perdida, sino una estrategia muy débil que no desestabiliza al narcotráfico”.
Respecto al negocio del narcotráfico en terreno, dijo el coronel Tunjano: “Si se enfocan los esfuerzos, como es actualmente en las incautaciones, pues realmente la incautación que se realiza por fuera de las áreas de producción ya generó una ganancia al cultivador de coca, al que compra la base y produce cocaína y a las organizaciones criminales que cobran por todos sus servicios en el territorio”.
Por su parte, Ricardo Vargas, sociólogo de la Universidad Nacional y experto en políticas de drogas, aseguró que las solas incautaciones de droga no le hacen un daño fuerte al narcotráfico en el país. “Que lo pongan en peligro, no. Lo que pasa es que eso hace parte de una estrategia que no ha mostrado que funcione. Todo lo que se haga ahí, igual que la reducción de hectáreas de cultivos, eso no tiene mayor repercusión”, manifestó.
Para los dos expertos, para que haya un impacto fuerte en la cadena del narcotráfico, debe haber una combinación de estrategias, entre las que se encuentran el lavado de activos, es decir, perseguir los dineros ilegales y sus derivados, un acompañamiento social en los territorios y una alianza internacional para que se frene la producción de cocaína.
“Lo que se necesita es un cambio de estrategia, porque al final esos indicadores no van a reducir el consumo internacional”, dijo Vargas sobre las incautaciones de cocaína. “Para mí lo fundamental es el golpe económico. Digamos, lo que es el lavado de activos, lo que es el control de las organizaciones, lo que es, digamos, golpear estructuras que trafican, pero sobre todo el lavado de activos, donde creo que el mundo también está perdiendo esa guerra”, añadió.