En las últimas horas, una motocicleta fue detonada en el parque principal del corregimiento de El Plateado, en Argelia, Cauca. El atentado terrorista dejó un soldado muerto y dos personas heridas, pero de paso, volvió a sacar a flote la preocupación que hay por la seguridad de los habitantes de esa zona después de que el Gobierno decidiera intervenir el control que venían ejerciendo las disidencias de las Farc, al mando de alias Iván Mordisco.
Por esa razón, la Procuraduría General de la Nación le hizo un llamado urgente al Gobierno para que aumente la presencia del Estado, en medio de los actos terroristas que han ejecutado los grupos armados ilegales en la región, que tienen intenciones de retomar el control de una zona estratégica para el narcotráfico y las economías ilícitas.
Frente a esa situación, el procurador Javier Sarmiento hizo un duro reclamo: “Ante la crítica situación que allí se vive, la respuesta institucional haya sido la programación de un concierto musical, desconociendo las urgentes necesidades de atención de las comunidades y poniendo en riesgo su integridad”.
Y es que la Procuraduría estuvo en El Plateado verificando la situación y evidenció el temor con el que conviven sus habitantes ante el recrudecimiento de los ataques —al parecer— perpetrados por las disidencias del Estado Mayor Central como retaliación por la Operación Perseo.
“Los grupos ilegales insisten en desconocer los principios de distinción, respeto por los bienes protegidos y uso prohibido de métodos de guerra consignados en el derecho internacional humanitario”, insistió el procurador delegado para los derechos humanos.
La Procuraduría ha alertado que las organizaciones criminales que hacen presencia en ese corregimiento del Cauca siguen violando los derechos fundamentales, como la educación, al instalar minas antipersonal en los alrededores del colegio Miguel Zapata, y utilizar niños para sus planes criminales.
Frente a estos alarmantes incidentes, el ente de control hizo un vehemente llamado al Gobierno nacional: “Agote pronto su fase de anuncios y expectativas, y asuma con celeridad las etapas de presencia integral en el territorio, y desarrollo de planes y estrategias que respondan a las necesidades inmediatas de la población”.
SEMANA conoció en exclusiva el informe de inteligencia de las órdenes de Mordisco sobre la escalada terrorista que ordenó en los departamentos de Cauca y Valle de Cauca. Uno de esos encargados para ejecutar los planes bélicos del cabecilla de las disidencias es Alexander Farfán Suárez, alias Gafas, quien fue el carcelero de la excandidata presidencial Ingrid Betancourt, secuestrada por las extintas Farc junto a políticos y militares que fueron rescatados en la mítica Operación Jaque.
“Toda acción militar pequeña, mediana o grande tiene que estar planificada con base en la inteligencia de combate, fuerzas propias y enemigas, avenidas de aproximación y repliegue”, es la orden de Mordisco que fue interceptada y que aparece en el documento en poder de SEMANA.
La instrucción del jefe del Estado Mayor Central también incluye: “Dominio de terreno, tiempo y distancias, medios de transporte y de combate, movilidad, campo traviesa, secreto y sorpresa, camuflaje y mimetismo, personal con alta disciplina, siempre listos para el combate con una dirección colectiva, cohesionada, fieles a las Farc, serios y cumplidores de los planes”.