Gran revuelo ha causado en el país la confesión que entregó Sneyder Pinilla, exsubdirector de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo (UNGRD), en exclusiva con SEMANA, sobre la presunta compra de votos de algunos congresistas por el Gobierno para buscar la aprobación de las polémicas reformas.

El exfuncionario reveló que el dinero para hacer los millonarios pagos en efectivo salió del escandaloso contrato de los carrotanques para llevar agua a La Guajira. Así mismo, contó a este medio que otros sobornos habrían sido pagados igualmente a través de negocios similares de la UNGRD.

Frente a todo esto, Pinilla se mostró arrepentido y aprovechó su confesión con SEMANA para pedirle perdón al país, por todo el daño que se pudo haber generado y su actuación errada estando como servidor público de una entidad tan importante.

“Creo que es la oportunidad para pedirle perdón al país, porque no actué correctamente. Esto se ha vuelto una política de Estado y lo único que puedo decir es que le pedimos perdón al país por la situación que se llevó a cabo y por eso estoy acá como indiciado en este proceso”, dijo.

Sneyder Pinilla, quien actualmente tiene 37 años de edad, fue alcalde de Sabana de Torres, Santander, entre 2016 y 2019. Es ingeniero civil y aseguró que no es cuota política de nadie, aunque a Olmedo López lo relacionan con el congresista Carlos Trujillo, del Partido Conservador.

“Yo no soy cuota política aquí de absolutamente nadie. Yo llego a la Unidad porque conozco al doctor Olmedo de tiempo atrás, llego a la Unidad por él”, manifestó el exfuncionario en diálogo con SEMANA, en medio que lanza una alerta para que se proteja a los testigos.

“En este momento estoy resguardando mi vida, pasando las duras y las maduras, con un frío enorme. Usted no se alcanza a imaginar todo lo que hago, porque desafortunadamente no hemos visto garantías en el proceso”, señaló Pinilla, de quien no se conoce su paradero para evitar un atentado.

“Desde el comienzo, hemos pedido seguridad y ha sido bastante complicado. Así que estoy aislado por mi propia seguridad, no escondido. No son cualquier tipo de personas las que estamos nombrando y en este momento estoy presto para colaborar”, confirmó a este medio.

En la entrevista con SEMANA, Pinilla agregó: “Tengo una familia, tengo dos hijos. Esto que estoy haciendo no es para nada fácil, pues teme uno por la vida. Hemos visto muchos ejemplos donde el testigo no alcanza a llegar ni siquiera a las audiencias, porque desafortunadamente lo desaparecen o pasa alguna otra situación”.

La mano derecha de Olmedo López se despacha en SEMANA y asegura que quieren asesinarlo. | Foto: Fotomontaje de SEMANA

Por eso, aprovechó los micrófonos de este medio “para pedirle a la Fiscalía seguridad y protección. Si el país quiere saber la verdad, que accedan al principio de oportunidad”.

De hecho, la comparación que hizo de su caso con el de Jorge Enrique Pizano, en el tema de Odebrecht, es estremecedora. “Me preocupa que la gente que está detrás de todo esto va a querer callarlo a uno. Como lo decía, lo que le pasó al doctor Pizano, o sea, yo no me voy a matar. Nunca he atentado ni atentaré contra mi vida. Pido garantías para poder decir la verdad”.

Pinilla dijo que teme una persecución, pues hay personas cercanas a Name que trabajan en la UNGRD. “Hay un sobrino, imagínese”.

Por su parte, Luis Gustavo Moreno, abogado de Pinilla, explicó que su cliente está reconociendo qué hizo en la trama de corrupción. “Levantó la mano y al hacerlo admite que hubo un ilícito”.