Enel Colombia se vio en la obligación de declarar indisponibles, a partir de este miércoles 7 de septiembre, dos unidades de generación de la Central Hidroeléctrica El Guavio, debido a los bloqueos que aún persisten en el municipio de Ubalá, en el departamento de Cundinamarca.
Además, esta situación ha significado restricciones de movilidad en la zona y el pasado 5 de septiembre se impidió el paso de los contratistas de Enel Colombia hacia la hidroeléctrica. Por lo tanto, las unidades de generación 1 y 5 no han podido ser inspeccionadas.
El Guavio es la hidroeléctrica más grande del país y cuenta con una capacidad instalada de 1.260 megavatios. Las dos unidades de generación que dejarán de operar aportan 500 megavatios, cerca del 40 % de la capacidad total.
A raíz de las manifestaciones, que este martes completan 23 días, Enel Colombia ha tenido que aplazar seis jornadas de mantenimientos en la Central Hidroeléctrica El Guavio, pues la comunidad de Ubalá no ha permitido el ingreso vehicular del personal que está a cargo de esta función.
Por ello, Enel Colombia también advirtió que, de no garantizarse la normal operación de El Guavio, los próximos 13 y 14 de septiembre quedarían indisponibles las unidades de generación de energía 4 y 2, respectivamente. Esto significa que quedarían por fuera de operación hasta 500 megavatios adicionales.
De acuerdo con la compañía, el tener en funcionamiento únicamente una unidad mayor (250 megavatios) y dos menores (5 megavatios cada una) significaría que la central hidroeléctrica más grande del país estaría operando al 20 % de su capacidad total.
“La operación de la Central Hidroeléctrica El Guavio no es sostenible sin poder realizar las inspecciones que nos permitan identificar oportunamente posibles anomalías en los equipos, razón por la cual hemos tenido que declarar indisponibles las unidades 1 y 5 y, próximamente, lo haremos con dos adicionales que tenían programado su mantenimiento la siguiente semana”, aseguró Eugenio Calderón, gerente de Enel Green Power & Thermal Generation de Colombia y Centroamérica.
Además, afirmó que operar las máquinas sin la certeza de su correcto funcionamiento incrementaría el riesgo al que ya se enfrenta el sistema eléctrico colombiano y el personal que labora para esta central hidroeléctrica, ubicada en el departamento de Cundinamarca.
En riesgo el suministro de energía
La Central Hidroeléctrica El Guavio produce el 7 % de la energía en Colombia y genera alrededor de 5.000 gigavatios hora por año, energía capaz de suplir las necesidades de 2 millones de hogares colombianos. “El suspender la operación de sus unidades pone en riesgo inminente la seguridad y confiabilidad del Sistema Interconectado Nacional (SIN), y la prestación de un servicio público esencial para los hogares y las ciudades”, advirtió Eugenio Calderón.
Por esta delicada situación, hizo “un llamado urgente a las autoridades competentes para que garanticen la correcta operación de la central hidroeléctrica y poder salvaguardar así la seguridad energética del país”.
Además de su aporte a la generación de energía en Colombia, las unidades de la Central Hidroeléctrica El Guavio representan el 35 % de las unidades equivalentes con las que cuenta el área oriental de Colombia para el control del nivel tensión.
De esta forma, el no operar con normalidad este activo implica el aplazamiento de mantenimientos de otras plantas que deben cubrir la seguridad energética de Colombia, lo que al final se traduce en mayores costos de la energía y en la pérdida de la confiabilidad en el suministro del Sistema Interconectado Nacional (SIN).
¿Por qué son los bloqueos?
El bloqueo al ingreso a la Central Hidroeléctrica El Guavio radica en la insatisfacción de los manifestantes frente al estado de las vías en el tramo comprendido entre Mámbita–San Pedro de Jagua y Puente Guavio–Santa María, una labor que legalmente está a cargo de las gobernaciones de Boyacá y Cundinamarca.
Enel Colombia aseguró que ha contactado en diversas oportunidades a las autoridades competentes para coordinar las mesas de diálogo que solicita la comunidad y asegurar el restablecimiento del orden público. No obstante, a la fecha no ha sido posible lograr una solución a esta situación.