El incremento de los casos de contagio por el segundo pico de la pandemia en Bogotá obligó a la administración distrital a tomar nuevas medidas restrictivas, que implican una cuarentena estricta y general en la ciudad entre este viernes y el próximo lunes.

El Ministerio de Salud, en su más reciente informe, señaló que la capital acumula 566.276 casos de contagio, 11.426 personas fallecidas y 502.400 recuperados. Además, la ocupación de camas UCI llegó al 93,2 %.

Ante esta situación, la Alcaldía de Bogotá expidió el Decreto 023 de 2001 en el que se establecen medidas como la restricción nocturna a la movilidad en el horario comprendido entre las 8:00 p. m. y las 4:00 a. m., que se vence este jueves.

Así mismo, continuarán en cuarentena estricta las localidades de Kennedy y Fontibón hasta este jueves a las 11:59 p. m.

Por su parte, la cuarentena total aplicará desde este viernes 22 de enero a las 8:00 p. m. y hasta el próximo lunes 25 de enero a las 4:00 a. m.

En cuarentena solamente podrán estar abiertos los establecimientos esenciales y solo podrán movilizarse quienes sean parte de las excepciones.

Cuarentena general en Bogotá desde este viernes 22 de enero hasta lunes 25 de enero.

La norma prevé además que las localidades de Bosa, Ciudad Bolívar, San Cristóbal, Puente Aranda, Rafael Uribe Uribe, Tunjuelito y Usme permanecerán en cuarentena estricta hasta el 28 de enero a las 11:59 p. m.

Mientras tanto, el pico y cédula continúa en la ciudad para el acceso a los establecimientos donde se realicen actividades tales como la adquisición y el pago de bienes y servicios; compra de cualquier producto al detal y por mayor; servicios bancarios, financieros, notariales y de atención al ciudadano en entidades públicas.

Las autoridades piden a los habitantes de Bogotá que intensifiquen las medidas de cuidado, continúen con la estrategia DAR (Detecto, Aíslo y Reporto) y evite reuniones familiares o sociales para evitar una mayor propagación del virus.

Crece la pobreza en Bogotá por pandemia

Ante la extensión de las medidas restrictivas, desde el Concejo de Bogotá pidieron medidas para evitar el impacto sobre el desempleo y el incremento de la pobreza. Según la concejala del movimiento Bogotá para la Gente, Marisol Gómez, la pandemia ha dejado en Bogotá más de 500.000 nuevos pobres.

Según la cabildante, esta situación está generando una catástrofe social que debe ser atendida prioritariamente por la administración distrital con el apoyo económico a los sectores vulnerables que han perdido el empleo y que en muchos casos han visto afectados sus ingresos derivados de negocios informales.

La concejala indicó que la cifra de 500.000 nuevos pobres en Bogotá aumentará en la medida en que las familias de bajos ingresos deban quedarse en casa por las cuarentenas para contener el segundo pico de contagio.

Gómez también explicó que de acuerdo con proyecciones preliminares basadas en la metodología de la Cepal y en mediciones de Fedesarrollo, la pobreza en Bogotá creció en siete puntos porcentuales durante 2020 al cerrar en 18,6 %, mientras que en 2019 el índice fue del 11,6 %.

“Los hogares pobres y vulnerables se duplicaron durante la pandemia, al pasar de 500 mil en 2019 a un millón el año pasado. “Son familias que no tienen ingresos suficientes para completar su ingesta diaria de alimentos o que tienen serios problemas para hacerlo. Ellas ya enfrentaban una situación apremiante en diciembre pasado y ahora, con las nuevas restricciones, pasan hambre”, aseguró.

Gómez propuso reforzar el programa de Ingreso Mínimo Garantizado que implementa el gobierno distrital hacia las familias más pobres, tras señalar que tal como existe hoy, ese programa y los subsidios del Gobierno nacional son insuficientes para contener los efectos sociales derivados de la contracción económica que ha generado la pandemia.

La concejala explicó que en 2020 fueron 831 mil hogares pobres y vulnerables de Bogotá los que recibieron transferencias monetarias del Distrito y de la Nación. Pero la ayuda promedió apenas $130.705 por mes para cada familia, según datos de Bogotá Solidaria y Prosperidad Social. Este monto, indicó, equivale al 26 % del costo de una canasta básica de alimentos, que asciende a $498.000 mensuales.

“La pandemia tiene una dimensión social que debemos tomar muy en cuenta y que debemos enfrentar con medidas más ambiciosas”, dijo.

“Lo grave es que volvimos a las cifras de 2009. Tuvimos un retroceso de 11 años en el tema social. La salud es muy importante, la vacuna es importante, pero hay que tener en cuenta que el 35 % de las familias no tienen ingresos suficientes para comer”, concluyó la cabildante.