El predio privado conocido como El Guácimo, ubicado en el corregimiento El Caguán, de Neiva, Huila, llevaba más de un mes invadido por centenares de familias que fueron desalojadas este miércoles 28 de septiembre en un masivo operativo adelantado por la fuerza pública. En el lugar se vivieron momentos de tensión por cuenta de quienes se resistían a abandonar el terreno.
Buscando no salir de este predio, algunos invasores encapuchados lanzaron piedras contra miembros del Esmad de la Policía. Sumado a esto, llenaron la vía que conduce al terreno con escombros y ramas de árboles, con el objetivo de obstaculizar el ingreso de la fuerza pública y ralentizar el desalojo.
En este operativo hicieron presencia la Policía, el Ejército, la Personería, la Defensoría del Pueblo, funcionarios de la alcaldía y organismos de emergencia.
Aquí cabe recordar que varios predios del corregimiento de El Caguán fueron invadidos tras la posesión del presidente Gustavo Petro con el “argumento” —tras palabras del entonces candidato a la Presidencia— de que la tierra no es de sus dueños, sino de quien la necesita. Incluso, uno de estos asentamientos recibió el nombre del mandatario.
Gorky Muñoz, alcalde de Neiva, aseguró que intentaron dialogar con los invasores para adelantar una salida tranquila del sitio, pero se resistieron a llegar a la conversación, por lo cual adelantaron el desalojo con la intervención del Esmad.
“Luego de agotar todas las vías de diálogo y acatando el debido proceso, se llevó a cabo la diligencia de restitución y protección del predio El Guácimo en el corregimiento El Caguán”, dijo.
De acuerdo con el mandatario, el desalojo se llevó a cabo en cumplimiento del “auto del 26 de septiembre, emitido por la Corregiduría de este sector, que ordena la protección de los derechos de los propietarios del mismo”.
Una vez realizado el procedimiento, las autoridades censaron a las personas que se estaban en la invasión, añadió Muñoz. Se estima que unas 700 familias habitaban el predio.
La Personería de Neiva dijo que entre los habitantes de la invasión había mujeres embarazadas y desplazados. En ese sentido, se investigan presuntas violaciones de derechos en el desarrollo de este operativo. “Hay algunas presiones que haremos en su debido momento, lo importante es que se garanticen los derechos de todos”, señaló la entidad.
Así mismo, la Personería dio cuenta de que en el desarrollo del desalojo varias personas resultaron heridas y que hubo daños ambientales debido a la tala de árboles usados para bloquear el avance de la fuerza pública.
La entidad también señaló que a la población víctima del conflicto les darán alojamiento temporal en un predio de la alcaldía de Neiva y le concedieron un tiempo “prudente” para sacar sus enceres de los cambuches instalados en el terreno El Guácimo.
Culminado el operativo, un grupo de trabajadores a bordo de maquinaria amarilla se desplazó hasta el lugar para retirar los elementos tirados sobre la vía por parte de los invasores y limpiar el espacio para habilitar de nuevo el paso. Se esperan nuevos desalojos en los próximos días en terrenos aledaños a El Guácimo.