El pasado martes 22 de marzo los estudiantes de San Andrés, en la provincia de García Rovira, en Santander, estaban felices porque podían ir al colegio y regresar a casa en una ruta escolar por primera vez, ya que antes debían hacer largas caminatas y hasta maromas, para ir a estudiar cada día.
Sin embargo, lo que en algún momento pudo ser alegría, se tornó rápidamente en angustia y tristeza, debido a un aparatoso accidente que cobró la vida de 6 niños que estudiaban en el municipio y regresaban de clase, junto a 16 compañeros más y un adulto, informó el coronel Franklin Cruz, comandante de la Policía de Santander.
El bus escolar que tenía placas SRY934, iba desde el Instituto Agrícola Laguna de Ortices hacia el municipio de San Andrés, cuando en el sector conocido como Alto de San Pedro frente a la Laguna, rodó aproximadamente 300 metros abajo.
Los cuerpos de los 6 niños que perdieron la vida en el siniestro vial, están en las instalaciones de Medicina Legal, en Bucaramanga desde la mañana del 23 de marzo. Serán entregados a sus padres y familiares, luego de ser sometidos a los estudios necesarios para determinar con exactitud las causas del deceso, respectivamente.
Por su parte, el mayor general Juan Libreros, director general de tránsito y transporte, aseveró en noticias RCN, que “se desplazó un equipo de la dirección de tránsito y transporte de la Policía que es experto en la reconstrucción de accidentes de tránsito, con el fin de establecer las causas”.
El general también desmintió la versión sobre posibles fallas mecánicas en el vehículo y añadió: “De acuerdo con la información recibida, los heridos han sido trasladados a centros asistenciales de la región, algunos a Málaga, otros a Bucaramanga. El conductor se encuentra en un centro asistencial en Málaga, el vehículo está siendo inspeccionado por los expertos, en el registro tenía los documentos al día”.
Cabe mencionar que una de las hijas del conductor también viajaba en el automotor. Según el gobernador del departamento de Santander, Mauricio Aguilar, al parecer, la ruta había sido contratada ilegalmente. Adicional a eso, se conoció que tenía los permisos necesarios para operar (Soat y demás) y que el modelo del vehículo es de 1998, lo que significa, que debió dejar de circular en 2019, aproximadamente y ser chatarrizado, pues la vida útil del mismo, ya se había cumplido.
Conforme lo dicta la ley 105 de 1.993 en el artículo 6º en que la vida útil máxima de los vehículos terrestres de servicio público de pasajeros y/o mixto será de 20 años, por tanto los vehículos que hayan cumplido la vida útil deberán sustituirse por nuevos.
Los niños que se movilizaban en ese momento y quedaron con heridas de gravedad, fueron trasladados a la capital del departamento, al Hospital Universitario de Santander. El director, Frank Serrato aseguró en Caracol radio, que “llegaron dos menores, uno de 12 y otro de 15 años, fueron valorados y están con politraumatismos pero no tienen criterio de gravedad. Ingresó también una menor de 10 años en estado crítico y pasó directamente a UCI pediátrica por fracturas y estudios diagnósticos”.
Al respecto, Noticias Caracol conoció el testimonio de uno de los estudiantes que sobrevivió a la tragedia: “Veníamos en la buseta cuándo creo que la buseta se quedó sin frenos y se fue para abajo. Cuando el bus se fue de la carretera para abajo me pegué en la cabeza y caí inconsciente. Después, creo que salí fuera del bus, rodé, por eso me hice estas laceraciones y después fue cuando mi tío Orlando me sacó. No vi nada más
“Entonces él fue por el carro y sacó a Mabel y a Keiner. Y también me ayudó a sacar. Y ya después una ambulancia me trajo hasta San Andrés (Santander)”, estoy feliz porque me dieron otra oportunidad de vida” aseguró el menor de 14 años quien se encuentra en recuperación en un hospital del municipio de San Andrés y su vida está fuera de peligro.