Se llama Thiago Rosero Lasso, pero todos lo conocen como ‘Thiago Birds’. Y aunque solo tiene 11 años, este pequeño de Santander de Quilichao, Cauca, se ha convertido en uno de los ornitólogos --en su caso empírico--, que más conoce sobre aves en todo el mundo.

Su historia ha emocionado a los asistentes de la COP16, pues Thiago conoce como nadie el nombre y las características de más de 500 especies de aves. Un amor que comenzó a cultivar en su natal municipio, que justamente es considerada “La primera ciudad de las aves de América del Sur”. Un título que él carga con orgullo y le fue otorgado por la Environment For the Americas y American Bird Conservancy, en marzo del año pasado.

Thiago Rosero Lasso: el niño que más sabe de aves en el mundo. | Foto: SEMANA

El pequeño Thiago narra que la semilla de su enorme pasión empezó por los días del covid-19, que obligó a una larga cuarentena en todo el mundo. Y mientras la mayoría de los ciudadanos permanecían encerrados en sus casas, temiendo el contagio de la peligrosa enfermedad, Thiago se dejó llevar por la curiosidad, y, acostado en una hamaca con su padre, Samir Rosero, observó a lo lejos un sicalis flaveola (semillero de la región) que bebía con entusiasmo en el comedero de la parcela de su abuela Gladys.

No conocía el nombre de la ave. Tampoco su papá. Y ese fue el comienzo de todo. Sería la abuela quien terminaría por encender en este niño la que desde ya considera que será su misión en la vida: ser un experto en aves. Ella le regaló un libro que se conservaba en casa, ‘Avifauna Colombiana’, de Fernando Ayerbe, primo de la familia.

En cada página, Thiago confirmaba su pasión. Por eso, hoy sueña con cuidar a las aves del planeta, construirles casitas y hasta fortalezas en las que puedan ser libres. Y va bien en la tarea. Después de la pandemia, comenzó a compartir con otros menores de edad su amor por las aves y los conocimientos sobre esta especie que va acumulando en el día a día.

Así nació ‘Thiago Birds’, una iniciativa con la que este pajarero experto habla con propiedad sobre la importancia de las aves, su cuidado y sus historias y que le ha valido renombre internacional entre los expertos y amantes de estos animales.

“Las aves son como flores volando, de ellas dependen los ecosistemas y la vida, muchos árboles no podrían crecer y plagas podrían acabar con cultivos, si ellas no existieran”, asegura el pequeño caucano.

Su talento especial cruzó la fronteras de su pueblo y hoy es un embajador de la ACO (Asociación Colombiana de Ornitología), así como miembro de ACOAVES (Asociación Caucana de Observadores de Aves) y de PAU Colombia (Programa de Aves Urbanas).

Después, fue por más. En 2023, viajó a Gramado, Brasil, para asistir al II Ornithological Congress of the Americas, una de las conferencias más importantes organizadas por La Asociación de Ornitólogos de Campo (AFO), y en la que se convirtió en el primer niño participante.

Y sus logros no ha parado. Desde septiembre pasado, hace parte del Delta Burning Festival, un punto de encuentro anual para ornitólogos y amantes de la naturaleza en el Parque Natural del Delta del Ebro, en Barcelona, España, que convocó a más de 100 personas.

Y fue sensación: era la primera vez que un niño de América presentaba una ponencia sobre las aves. “Nuestro planeta es maravilloso, somos afortunados de vivir en un lugar mágico, es el único que tenemos, si lo destruimos, nos extinguimos, por eso lo tenemos que cuidar”, asegura este niño genio.

Por eso, no es de extrañar que una de sus películas favoritas sea Río, o que su color favorito sea el verde, el que más buscan los animales que tanto admira y que desde esta semana son protagonistas en la más importante cita con la biodiversidad de la que Colombia es sede por primera vez: la COP16.

* Con apoyo de Zhaluna Ramírez | Centro de Medios UAO - COP16.