Suena el primer Tik Tak de este miércoles 2 de febrero en SEMANA y suena por los lados del papa Francisco, porque sin querer o queriéndolo, el pontífice le dio al candidato presidencial Gustavo Petro el banderazo que necesitaba para graduarse como el guiño del pontífice a las elecciones colombianas.

No importa que no haya habido fotos, no importa que no existan videos para hacerle propaganda el encuentro, la sola noticia de que el papa Francisco aceptó reunirse con uno de los candidatos de la campaña presidencial colombiana es rotunda, a lo mejor ni siquiera es por encima de los demás, pero así quedó con esa intención para la historia.

Y por parte de Petro, una jugada maestra, porque es la única que no puede empatar uno de sus más importantes rivales, Alejandro Gaviria, que ha hecho gala de ateo y que por consiguiente nada tiene que ir a buscar al Vaticano, no es su destino espiritual. En cuanto a los demás candidatos, deben de estar preguntándose a qué horas les hicieron esa jugadita y qué papel jugó la nunciatura en Colombia en todo esto, ¿uno claramente político?

Porque otro candidato, Rodolfo Hernández, no tiene aún respuesta a la misma petición de ir a visitar al papa, pero en caso de que lo reciban —y esto desde luego no es improbable— ya no importa, el show se lo llevó Gustavo Petro.

Francisco no era ajeno al revuelo que causaría, por eso impuso la condición de que la reunión no se filtrara antes de tiempo; no es usual que el pontífice reciba candidatos, pero tenía que ser perfectamente consciente de que así no lo quisiera, recibir a Petro iba a resultar una aval y eso no pasa inadvertido para los votantes de un país como evidentemente es mayoritariamente Colombia, católico. Mientras a la Selección Colombia le meten goles, Petro los mete. ¡Gol de Petro!