Suena el segundo Tik Tak de hoy, miércoles 17 de agosto, en SEMANA y suena por los lados la nueva desaparición, de su presencia en la agenda pública, del presidente Gustavo Petro Urrego.

El país no terminaba de comentar el desplante a 600 alcaldes que lo esperaron durante horas y horas en el Salón Rojo del Hotel Tequendama, cuando ayer se produjo algo, quizá, más delicado. El reconocimiento de militares, previsto en la escuela José María Córdova, no contó con la presencia del presidente de la República.

Esto luego de haberse brincado a 52 generales, con los ascensos que hizo en la Policía y el Ejército, lo que tiene muy pensativa a la cúpula del Ejército y de la Policía desde luego. Aunque algunos deben estar felices por el ascenso súbito, era más institucional que nunca. Pero el presidente Petro no llegó y no solo dejó metidos a los militares, sino que tampoco posesionó a los ministros pendientes. Dos de los cuales están en problemas, inexplicablemente emproblemados, porque denota una falta de cuidado en su escogimiento y en la revisión de las hojas de vida.

César Ferrari, el peruano, italiano, designado en la dirección de Planeación Nacional, equivalente en rango a un ministerio, no podía posesionarse porque no es colombiano por nacimiento, sino por adopción. ¿Es que nadie se da cuenta de que el señor no podía ser nombrado allá por más pedigrí o por más hoja de vida, que la tiene excelente? La ministra de las TIC, Mery Gutiérrez, a la cual le falta mucha explicación para dar acerca de sus requisitos y posibles impedimentos para ocupar ese cargo, pues tampoco se posesionó.

La disculpa no oficial de la escuela José María Córdova es que no estaban listos los decretos de ascenso de los nuevos mandos. Pero eso tampoco explica el desgobierno, como lo de los ministros, que a diez días de la posición del nuevo gobierno no están completos. Por cuenta de que no hubo la suficiente diligencia de parte de alguien, como el asesor jurídico del Palacio para revisar las hojas de vida.

Nuevamente, aparecen las preguntas: ¿es un estilo de Petro el de dejar plantados desde 200 militares hasta 600 alcaldes? Su falta de puntualidad es famosa, pero que se pierda en ocasiones tan institucionales como el reconocimiento de tropas es ya francamente sospechoso. El presidente tuitea para todo, ¿cómo es que no hay una explicación oficial? Así sea por esa ruta no oficial de un Twitter de la conducta del presidente Petro.

¿Cuántos desplantes de Petro le hacen falta al país? La última vez que dizque estaba en Caño Cristales probándose la banda presidencial, cuando se supo que el video respectivo era de julio. Ahora quién sabe qué disculpa chimba nos van a dar, porque dejar plantadas a las fuerzas militares del país es una falta de respeto y punto.