Suena el primer Tik Tak de hoy viernes 3 de junio en SEMANA y suena por los lados del centro, porque siguen los análisis de qué le pasó a la campaña de Sergio Fajardo con personas muy vistosas a bordo, como los hermanos Galán, Humberto de la Calle, Jorge Enrique Robledo y los ya idos para donde Petro, Alejandro Gaviria y Guillermo Rivera.
Pero entre todas las explicaciones escuchadas, llaman principalmente la atención las de la fórmula vicepresidencial de Fajardo, el exministro Luis Gilberto Murillo, que llegó más rápido donde Petro de lo que dura un merengue en la vitrina al frente de un colegio. Pues Murillo no dejó tiempo para que el movimiento de Fajardo reflexionara sobre las ventajas o desventajas de los futuros apoyos. No, el doctor Murillo salió volado y con una explicación bastante controvertible sobre la derrota de Fajardo.
Según habla de una forma orquestada, como fue posicionado en el imaginario del electorado, que solo existían las opciones de Petro o Fico Gutiérrez. Pero tan no fue así, doctor Murillo, que el que terminó imponiéndose fue el ingeniero Rodolfo, al tiempo que a esta hora ni siquiera sabemos si será el que se quede el premio mayor, el título del presidente de Colombia.
Pero según Murillo, eso invisibilizó las propuestas del centro, llevó a que la gente no las escuchara y los condujo a la derrota, es decir, la culpa fue de los demás, cuando el candidato Rodolfo, en cambio, sí pudo. Responsablemente, otros integrantes del Centro han estado menos veloces, pero más reflexivos para alinearse con uno o con el otro.
Para hoy se espera la adhesión de los hermanos Galán a Rodolfo y no sería raro ver a Juan Manuel ocupando un importante cargo en su eventual gobierno. No extrañaría, tampoco, el acercamiento del pilo senador Robledo y desde luego, el de la cabeza del equipo, Sergio Fajardo.
Pero algunos desprecian este acercamiento por los muy regulares resultados del centro en las elecciones y se equivocan, esto más que por los votos que le pueden aportar a Hernández, es una cuestión simbólica. Así como lo fue el apoyo de Alejandro Gaviria, exrector de Los Andes, exministro y excandidato presidencial a Petro; es su prestigio, aunque muy probablemente no le ponga un voto.
Luego, muy probablemente, se inicia una temporada de adhesiones, pero más serenas, más cuidadosas y más reflexivas que la del doctor Murillo, cuya rapidez deja pensando si no debió estar allá donde Petro desde el principio y si lo que se atravesó en el apoyo de Murillo a Petro desde el comienzo, no fueron los cantos de sirena de una Vicepresidencia que no cuajó, porque el doctor Murillo se cambia de sitio más rápido que de camisa.