A las 6:12 a. m. suena el segundo Tik Tak de hoy jueves 21 de abril en SEMANA y suena por los lados de Piedad Córdoba, porque ayer Petro le pidió suspender las actividades en su campaña a estas alturas, mejor dicho, porque ya Piedad se hizo elegir senadora en la coalición de Petro por el Pacto Histórico y protegida por él, y hasta ahora Petro viene a descubrir que Piedad es Piedad.

Ella ya había sido motivo de controversia interna, y a Petro cuando la necesitaba no le importó, acaso desde hace rato no se conocían los negocios de Piedad con Álex Saab y sus gestiones de relaciones públicas para que Venezuela pagara deudas a empresarios colombianos a cambio de comisiones de éxito.

Y su asesoría a las Farc en el manejo de su imagen a la hora de liberar a los secuestrados y sus instrucciones para demorar la liberación de Ingrid Betancourt, por el valor publicitario como ciudadana francesa que ella representaba si seguía secuestrada, y los controvertibles orígenes de la fortuna personal de Piedad.

Nada de eso es nuevo, esa era la Piedad que Petro invitó a bordo, la Piedad de siempre, la Piedad de los últimos años. Lo nuevo son las misteriosas visitas que con la disculpa de ver o de pasarle revista a su hermano, que está detenido en La Picota, pues Piedad supuestamente hizo a otros extraditables narcos de calibre.

Una vez más, Petro oliéndose la polémica que ahora se le venía encima por cuenta de Piedad, le pidió que se quitara de su camino. Y como era obvio, Piedad ya salió decir que la privación de libertad de su hermano es producto de una acción de, palabra mágica por estos días, un entrampamiento orquestado por agentes de la DEA dizque para afectar campaña del Pacto Histórico. ¿Se saldrá una vez más Gustavo Petro con la suya?