Rodrigo Londoño Echeverry, Jaime Alberto Parra, Milton de Jesús Toncel, Pablo Catatumbo Torres Victoria, Pastor Lisandro Alape Lascarro, Julián Gallo Cubillos y Rodrigo Granda Escobar, los últimos integrantes del Secretariado de las Farc, fueron convocados a juicio por la Sección de Primera Instancia para Casos de Reconocimiento de Verdad y Responsabilidad de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) dentro de caso 01 que hace referencia a toma de rehenes y graves privaciones de la libertad cometidas por las Farc en medio del conflicto armado.
Con el inicio de la fase de juicio se procederá a la resolución de conclusiones en contra de los excomandantes que ya aceptaron su plena responsabilidad en estos crímenes de guerra y de lesa humanidad.
La Sección de Primera Instancia para Casos de Reconocimiento del Tribunal para la Paz emitirá las respectivas sanciones en contra de los integrantes del Secretariado y verificará el cumplimiento de las mismas con el apoyo de la Misión de Monitoreo y Verificación de las Naciones Unidas; estas sanciones deben tener el más alto componente reparador y restaurador para las víctimas.
Teniendo en cuenta el funcionamiento de la JEP, lo que pasará ahora es que tras asumir la respectiva competencia la Sección de Primera Instancia para Casos de Reconocimiento de Verdad y Responsabilidad, deberá agotar el procedimiento dispuesto en la normatividad que la regula como lo es evaluar la correspondencia entre los hechos, las pruebas allegadas, las conductas endilgadas y reconocidas, la propuesta de sanción, las condiciones de contribución a la verdad y la reparación, realizando audiencia para verificar la forma de reparación en el marco de SIVJRNR y posteriormente emitir la sentencia.
La aceptación de cargos
En una audiencia pública celebrada entre los días 21 y 23 de junio de 2022, los exjefes de las Farc reconocieron su responsabilidad, de manera individual y colectiva, en la comisión de los crímenes de guerra de toma de rehenes, homicidio, tortura y tratos crueles, atentados contra la dignidad de la persona, violencia sexual y desplazamiento forzado; y de los crímenes de lesa humanidad de graves privaciones de la libertad, asesinato, desaparición forzada, tortura y otros actos inhumanos, violencia sexual y desplazamiento forzado.
Estos delitos fueron imputados por la Sala de Reconocimiento de la JEP en el Auto No. 19 de 2021. La resolución se emitió teniendo en cuenta los informes entregados por organizaciones sociales e instituciones estatales, versiones colectivas e individuales de comparecientes y observaciones de las víctimas acreditadas. Tras considerar que hubo reconocimiento y aportes de verdad plena, la Sala de Reconocimiento adoptó el 24 de noviembre de 2022 el documento de conclusiones que fue remitida al Tribunal para la Paz para lo de su competencia.
Nunca entendí lo de las cadenas
El pasado 21 de junio, el excomandante máximo de la guerrilla de las Farc, Rodrigo Londoño Echeverry, conocido como Timochenko, reiteró el ofrecimiento de perdón a las víctimas del secuestro durante el conflicto armado.
Tras escuchar la declaración de varias de las víctimas, entre las que se encuentran policías y soldados, reseñó que a esta hora no le cabe en la cabeza que hubieran sometido a estas prácticas inhumanas a los secuestrados.
“Yo quisiera poder decir: ‘Yo no ordené esto, ordené aquello’, porque además no lo hubiera ordenado. A mí no me cabe la cabeza que nuestros mandos hayan ordenado y permitido esto. En medio de la vorágine de la guerra, nos enceguecimos y nunca dimensionamos esto”, manifestó Timochenko, en medio de la audiencia de reconocimiento por los secuestros extorsivos y los plagios de civiles e integrantes de la fuerza pública para presionar al Gobierno por un intercambio humanitario.
Señaló que, en medio del conflicto armado, perdieron la noción de humanidad. “Nosotros veíamos el uniforme y el fusil: no veíamos al ser humano”, reconoció el último jefe de la guerrilla de las Farc.
Londoño recordó que en muchas oportunidades ha sido cuestionado por sus actos durante el conflicto armado, muchas personas le han preguntado qué siente cuando escucha a las víctimas a lo que ha respondido: “Sinceramente, yo quisiera que la tierra me tragara”. Y es que no es para menos, durante la audiencia que se adelanta, varias víctimas han detallado los tratos inhumanos a los que fueron sometidos durante el cautiverio.