Por estos días, cientos de personas se acercan al departamento del Meta, especialmente a los municipios de Villavicencio y Acacías, para conocer, aprender y disfrutar de este baile típico y la cultura llanera.
Este evento, en el que se espera superar más de 200.000 turistas, no es simplemente es baile, ya que ofrece todo un mundo de actividades llenas de color, amor y alegría.
Acacías palpitó al ritmo de los caballos
El pasado viernes, 13 de octubre, se realizó la cabalgata inaugural en Acacías, uno de los aspectos más significativos de esta fiesta donde los animales también son protagonistas.
Pese al día caluroso que se vivió, habitantes y turistas salieron a las calles, balcones y parques para observar a cada uno de los jinetes que, con movimientos habilidosos, lograron dominar a los animales y mostrar las maravillas que pueden hacer estos mamíferos pertenecientes a la familia de los équidos.
Mostrando sus hermosos caballos y vestidos con ropa típica del Llano, como los llamados sombreros vegueros o criollos, los jinetes recorrieron varios kilómetros, brindaNdo un gran espectáculo que fue aplaudido por los asistentes en cada esquina y lugar por el que pasaron.
Un desfile lleno de color
Otra de las actividades que ha llenado esta fiesta de color en el departamento del Meta ha sido el desfile en carrozas de las candidatas al Reinado Nacional e Internacional del Joropo, el cual se llevó a cabo este sábado.
Fueron 14 las mujeres que desfilaron por las calles de Villavicencio luciendo atuendos pintorescos y con aspectos propios de cada una de sus tierras.
Las candidatas compartieron carrozas diseñadas con distintos materiales alusivos a la gran belleza natural y artística que tiene Colombia, demostrando que es un país que se caracteriza por estar unido, más allá de las diferencias que se puedan presentar en muchos aspectos.
Las participantes se vieron sorprendidas por la gran cantidad de personas que salieron a las calles para gritar su nombre y aplaudirles, gestos de cariño que devolvieron con hermosas sonrisas y besos.
Joropódromo: bailando al ritmo de los Llanos y la inclusión
Una de las partes más esperadas fue el llamado Joropódromo, el cual se realizó en la Avenida 40 de Villavicencio, una de las principales vías de este municipio.
Con trajes típicos llaneros y bailando al ritmo de la música más característica de esta tierra, más de 3.000 bailarines demostraron su talento llevando un compás impecable durante casi dos kilómetros.
Niños y adultos lograron deslumbrar a los cientos de personas que salieron a las calles para vibrar al ritmo del Llano y mostrar lo orgullosos que se sienten de pertenecer a esta parte del territorio nacional.
Además de la música y el baile, este evento se caracterizó por ser inclusivo gracias a las diferentes categorías que brindó.
Personas con discapacidades, de la comunidad LGBTI y de lugares que han sido golpeados por la violencia, también pusieron a vibrar a los asistentes con cada uno de sus movimientos y dando una muestra de sacrificio y lucha, dejando claro que las limitaciones suelen estar es en la mente.
Nicky Jam cerró el día con broche de oro
Ya en horas de la noche, el puertorriqueño Nicky Jam, uno de los reguetoneros más importantes a nivel mundial, hizo presencia en Malocas y fue uno de los encargados de cerrar el día.
Con clásicos como Yo no soy tu marido y Hasta el amanecer, el artista puso a bailar a fanáticos que se acercaron hasta el coliseo para vivir una experiencia única
Además de Nicky, estuvieron presentes grandes exponentes de la música llanera como el ‘Cholo’ Valderrama y Walter Silva, dos de los maestros más importantes de este tipo de música en Colombia, por lo que fueron recibidos con aplausos, arengas y todo tipo de muestras de cariño.
Ahora, los llaneros se preparan para cerrar este gran evento con la elección y coronación de la Reina Internacional del Joropo y la Gran Final del Encuentro Mundial de Coleo.
Como cada año, los habitantes demostraron nuevamente lo orgullosos que se sienten de sus raíces llaneras y esperan que su cultura y tradiciones perduren por mucho tiempo.