Este sábado, una devastadora situación se originó en el corredor vial de La Línea, más exactamente entre la vía que conecta a los municipios de Cajamarca y Calarcá. De acuerdo con los primeros reportes de las autoridades, un aparatoso accidente se registró en el túnel Las Mariposas, que hace parte de la concesión vial mencionada.
En el siniestro fallecieron dos personas y otras tres resultaron heridas. Las informaciones preliminares apuntan a que todas las víctimas son miembros de una misma familia. Los sobrevivientes fueron trasladados a un centro asistencial cercano.
Las hipótesis aseguran que el automotor en el que se movilizaba la familia habría presentado una falla en el sistema de frenos cuando se encontraba realizando un descenso hacia el municipio de Calarcá. Esto generó que el conductor perdiera por completo el control del vehículo y que este impactara contra un vehículo de carga que estaba adelante.
En el punto se encuentran los cuerpos de bomberos, ambulancias y personal de la Seccional de Tránsito y Transporte de la Policía en el Quindío. Las autoridades aseguran que la vía estuvo interrumpida mientras se realizó el levantamiento de los cuerpos, aunque ya se encuentra habilitada nuevamente.
Tras los hechos presentados en el corredor vial, las autoridades elevaron algunas recomendaciones para quienes se disponen a realizar viajes en carretera. Recomiendan siempre verificar todos los sistemas del vehículo antes de emprender su viaje y también a respetar los límites de velocidad y no consumir alcohol antes de manejar.
Es importante tener en cuenta que el pasado mes de julio, algunas de las cifras reportadas por la Contraloría demostraron que Colombia alcanzó la cifra más alta de siniestros viales del siglo, pues entre 2022 y 2023 se tuvieron los registros más altos, superando las 8.600 víctimas. Esta causa ocupa el octavo lugar de muerte general en la población colombiana.
Esta sería la estrategia en Bogotá para reducir muertes en accidentes de tránsito
Para nadie es un secreto el aumento del uso de la motocicleta como medio de transporte. Al ser un vehículo económico, se convirtió en una solución de movilidad para cientos de miles de bogotanos. Lamentablemente, dicho incremento ha generado un grave problema de salud pública: los motociclistas se están muriendo en las vías de la ciudad en mayor proporción que los demás usuarios.
Históricamente, los peatones eran el grupo con la mayor tasa de mortalidad debido a su vulnerabilidad en las vías, al no contar con protección ante un siniestro vial. Sin embargo, desde 2020 la tendencia cambió y los usuarios de moto, que ocupaban el segundo lugar, se convirtieron en las principales víctimas.
Si comparamos la situación con 2019, el último año previo a los cambios en las dinámicas de movilidad debido a la pandemia, el balance es poco alentador. Ese año perdieron la vida 163 usuarios de moto, 33,8 % del total (482) de fallecidos en siniestros de tránsito. Pero en 2023 el número de motociclistas en siniestros fatales fue de 242, equivalente a 44,6 % de las 543 muertes. Esto es un incremento de 79 vidas perdidas entre los dos períodos comparados, un aumento del 47,6 %. La mayoría eran hombres jóvenes, entre 20 y 34 años.
Para tratar de reducir esta epidemia mortal, la Secretaría de Movilidad trabaja desde diferentes áreas con acciones de control basadas en datos que permitan disuadir comportamientos riesgosos, infraestructura que cree entornos más seguros para los usuarios, estrategias de comunicación que informen a los ciudadanos lo que está ocurriendo y cómo evitarlo, y campañas de cultura que promuevan cambios de comportamiento. Todas estas estrategias se monitorean constantemente para medir su efectividad y ajustar lo requerido para reducir las muertes en las vías.