La migración irregular hacia Estados Unidos es una cuestión de azar, cumplir el sueño americano en ocasiones cuesta la vida, pero además los marchantes se enfrentan día a día al riesgo de caer en manos redes de tráfico de personas que les sacan la plata, no les cumplen o los dejan tirados. Pero lo que está pasando en San Andrés no tiene nombre y ya les ha costado la vida a 59 migrantes, según lo denunció la Procuraduría General de la Nación.

El Mar de los Siete Colores, Isla San Andrés, Colombia, Sur America | Foto: derechos de autor no

Por este motivo, la Procuraduría lanzó “una alerta ante la grave crisis humanitaria que presenta el archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina por el dramático aumento de la migración ilegal y pidió a la autoridades locales, departamentales, nacionales e incluso a las aerolíneas, que refuercen sus controles para evitar que ciudadanos de diferentes nacionalidades del mundo sean víctimas de redes de tráfico de personas”.

Y es que se han evidenciado prácticas que violan todos los derechos de los migrantes, les reciben la plata y los dejan tirados, pero esta vez en San Andrés, donde no hay forma de salir que no sea en avión.

Según le narraron pescadores y habitantes de la isla a la Procuraduría, se han presentado varios casos de migrantes a quienes les aseguran que ya llegaron a su destino, afirmando que arribaron a Nicaragua, y finalmente les quitan el dinero y los dejan a su suerte.

El procurador para los Derechos Humanos, Javier Sarmiento Olarte y su equipo, lograron evidenciar en visita a la isla que, a pesar de una disminución en la llegada de pasajeros en vuelos comerciales, en lo que va de 2023 aumentaron los casos de interdicción de embarcaciones y rescate de migrantes irregulares en las aguas del archipiélago, realizados por la Armada Nacional.

Lo más alarmante, señalan desde la Procuraduría, “es la grave crisis humanitaria que viven niños y niñas, incluso recién nacidos, mujeres en gestación y adultos de diversas nacionalidades, varios de los cuales han desaparecido en el mar abierto del archipiélago buscando llegar a Centroamérica”.

La Procuraduría Delegada para la Defensa de los Derechos Humanos llegó en las últimas horas hasta el Cayo Pescador del archipiélago, en compañía de la Armada Nacional, donde pudo evidenciar que los migrantes irregulares son ubicados en resguardos artesanales y cambuches donde pasan la noche a la espera una embarcación que los lleve hasta Nicaragua.

“En el recorrido se encontró ropa y pañales de bebés e incluso alimentos enlatados que los migrantes dejan abandonados en el afán de su travesía hacia Centroamérica”, aseguró el delegado Sarmiento.

De igual forma, a través de la recolección de testimonios de pescadores aparcados en este lugar, la Procuraduría pudo confirmar “la presencia de las redes de traficantes que engañan a los migrantes ofreciendo una ruta segura de viaje, pero que en realidad los someten a viajar en embarcaciones no aptas para el traslado de pasajeros, con sobrecupo y tomando rutas que, en condiciones climáticas adversas, aumentan el peligro de naufragio en mar abierto”.

Los testimonios son demoledores y son cosas que pasan casi a diario, los mismos pescadores de la zona afirmaron que “los traficantes dejan a los migrantes acá, tirados, les dicen que esto es Nicaragua, les quitan la plata y los abandonan. Nosotros les ayudamos para sobrevivir mientras tiene como devolverse a San Andrés en alguna embarcación de turistas”.

Ronald Housni JallerExgobernador de San Andrés y Providencia | Foto: Guillermo Torres Reina - Publicaciones Semana

Los migrantes son víctimas de traficantes ilegales y de trata de personas que están ofreciendo una ruta VIP de migración irregular, viajando en avión desde Cali, Medellín, Cartagena y Bogotá hasta el aeropuerto de San Andrés.

Luego de pasar una noche en la isla, las redes los embarcan en una peligrosa travesía por mar abierto, haciendo transbordo en los cayos Albuquerque y pescador, al sur del archipiélago para llegar a Nicaragua en su tránsito hacia Estados Unidos.

Desde junio del año pasado, la Procuraduría confirmó por medio de informes de la Armada Nacional y recorriendo una de estas rutas utilizadas por los traficantes ilegales, que han sido rescatados 804 ciudadanos de distintos países de origen como China, Vietnam, Uzbekistán, Venezuela, Ecuador y República Dominicana, entre otros.