El cuerpo de Bomberos de Cundinamarca reveló en su más reciente reporte de este jueves 20 de julio, que la cifra de fallecidos tras la avalancha que se registró el pasado martes en el municipio de Quetame, se elevó a 21.
De acuerdo con dicho reporte, entre los fallecidos hay seis menores de edad, 12 adultos (siete mujeres y cinco hombres), así como tres personas sin identificar.
También indicaron que aún hay ocho personas desaparecidas y seis lesionadas, cinco de las cuales se encuentran recluidas en el hospital de Cáqueza, mientras que otra fue trasladada a Villavicencio.
En cuanto al número de familias afectadas, desde el cuerpo de Bomberos de Cundinamarca afirmaron que son 29.
Entre tanto, el reporte también destacó que 10 viviendas resultaron destruidas y que fueron ocho las veredas que se vieron afectadas tras la avalancha.
Tras esa fuerte avalancha, la vía Bogotá - Villavicencio tiene cierre total indefinido.
La Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (Ungrd), publicó en las últimas horas un comunicado de prensa en el cual informó que las labores de búsqueda que se estaban desarrollando en el municipio de Quetame, Cundinamarca, fueron suspendidas.
Así mismo, la entidad indicó que se iniciaron actividades de evacuación para garantizar el bienestar de las personas que se encuentran en las zonas aledañas a la zona del desastre.
Las decisiones se tomaron después de un análisis que hicieron las autoridades que estaban haciendo parte del Puesto de Mando Unificado (PMU), el cual se creó para atender el desastre provocado por la avalancha.
Encontraron que hay un “represamiento” en la parte alta y baja del río Contador, lo cual también incide en el caudal del río Negro. Uno de los temores de las autoridades apunta a que las actividades de búsqueda provoquen un aumento en los niveles de este último afluente.
“Por estas razones, se alerta de manera preventiva a la comunidad en general evitar el ingreso a la ronda del río y a sus ribereños. Asimismo, se pide estar muy atentos a los niveles de los ríos y a los comunicados que estaremos emitiendo desde nuestros canales oficiales”, señaló la Ungrd en su boletín.
El nuevo anuncio de las autoridades implica que por lo pronto no podrán ser encontrados los cuerpos de más víctimas.
Durante una visita que hizo a la vereda El Naranjal, el defensor del Pueblo, Carlos Camargo, aseguró que la tragedia ocurrida el pasado 18 de julio pudo haberse prevenido, pero las autoridades no implementaron las medidas que se requerían para evitar el desastre.
Según explicó Camargo, la Defensoría del Pueblo ya le había puesto la lupa a la zona hace ocho años, en el 2015, pues había interpuesto una acción popular ante el Tribunal Administrativo de Cundinamarca.
En el recurso, la Defensoría del Pueblo les pedía a la Agencia Nacional de Infraestructura, la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres, Coviandes y la Gobernación de Cundinamarca hacer análisis e investigaciones que permitieran evaluar a qué riesgos se atenía la población del municipio de Quetame a raíz del trazado de la vía.
Adicionalmente, el Defensor del Pueblo indicó que la acción popular que interpuso estaba basada en el hecho de que la zona presentaba un alto impacto a raíz de sus características hidrológicas y meteorológicas, lo cual significaba que la comunidad estaba en peligro.