Este lunes culminan los tres días de duelo decretados en el departamento de Magdalena en solidaridad con las víctimas de la tragedia de Tasajera. La explosión del camión cisterna cargado de combustible ocurrió el pasado 6 de julio y desde entonces han fallecido 36 personas a causa de las quemaduras de segundo y tercer grado que tenían en su cuerpo.

La última víctima fue un hombre internado en la Clínica Reina Catalina de Barranquilla, pero se desconocen detalles de su identidad. El fin de semana pasado estuvo atravesado por el dolor de cinco familias más que perdieron a sus seres queridos en distintos centros médicos del país. Dos estaban internados en la capital del Atlántico, dos en Valledupar y uno en Bogotá. Carlos Caicedo, gobernador del departamento, encabezó el pasado sábado la ceremonia a las víctimas en el Palacio Tayrona. Durante el evento se ordenó  bajar a media asta la bandera del Magdalena en todos los edificios públicos.

“Nosotros hemos hecho lo que nuestro corazón y valores nos imponen y vamos a seguir haciendo todo lo que esté a nuestro alcance porque aquí casi 60 personas se inmolaron por la necesidad, por la falta de oportunidades que históricamente han tenido porque Puebloviejo es uno de los municipios más pobres no solo del Magdalena, sino de Colombia”, dijo Caicedo. Vale recordar que Magdalena declaró la calamidad pública para atender a los afectados y sus familias de manera prioritaria. La Gobernación ha entregrado ayudas económicas para transporte, alojamiento y alimentación de las personas que han viajado a acompañar a los heridos a las ciudades donde son asistidos. Además, la calamidad pública permite priorizar recursos para que los habitantes de Tasajera tengan atención en salud, se mejore el acceso a servicios básicos como el agua y la luz y se brinde respaldo a la alcaldía para prevenir futuros riesgos y accidentes como el ocurrido en la vía que conduce de Barranquilla a Santa Marta.