La Fiscalía General de la Nación llevó a cabo una investigación sobre los grupos narcotraficantes del Pacífico, que resultó en el descubrimiento de una embarcación que habría salido de Tumaco, Nariño, con una carga de cocaína hacia Centroamérica.
Gracias a la rápida respuesta del CTI, la Armada Nacional y las agencias internacionales antidrogas, la nave fue interceptada cerca de la Bahía San Ignacio en Francisco Pizarro, Nariño.
Durante la inspección, se encontraron 985 bloques de estupefacientes envueltos en caucho y papel celofán, lo que equivale a aproximadamente una tonelada de clorhidrato de cocaína.
Como resultado, los tres hombres de nacionalidad ecuatoriana que se encargaban del transporte marítimo fueron capturados y llevados ante un juez de control de garantías, enfrentando cargos por tráfico, fabricación o porte de estupefacientes agravado, y construcción, comercialización o tenencia de semisumergibles o sumergibles agravado.
Aunque los acusados no aceptaron los cargos, los elementos de prueba obtenidos sugieren que el alijo pertenece a una red criminal que se dedica al movimiento de cocaína a través de semisumergibles y pilotos de diferentes países, con el objetivo de llegar a la zona de frontera entre Guatemala y México. Como resultado, se les impuso la medida de aseguramiento privativa de la libertad en un centro carcelario.
Armada detuvo semisumergible con coca
En el desarrollo de tareas de seguridad y control en el océano Pacífico colombiano, la Armada de Colombia interceptó un semisumergible de unos 15 metros de largo, que llevaba 2643 kilogramos de clorhidrato de cocaína destinados a Centroamérica.
Tras encontrar el artefacto ilícito, el personal militar descubrió a dos personas enfermas en la parte superior del semisumergible, quienes aparentemente habían sufrido un accidente debido a los gases tóxicos del combustible. Los dos hombres fueron trasladados a un barco cercano para recibir atención médica y salvaguardar sus vidas.
Durante la inspección, se encontraron dos cuerpos sin vida en el semisumergible, que tenía un gran acceso de agua. Después de estos procedimientos, los marinos colombianos recuperaron la cocaína que estaba siendo transportada. Posteriormente, las personas rescatadas, los cuerpos y la droga fueron llevados a Tumaco, en Nariño, donde el Cuerpo Técnico de Investigación de la Fiscalía General de la Nación determinó que se trataba de clorhidrato de cocaína.
Con este operativo, en colaboración con otros países, se evitó que más de 87 millones de dólares ingresaran a las organizaciones financieras de los grupos de narcotráfico que actúan en el Pacífico colombiano y que más de seis millones de dosis de droga circulasen en el mercado negro internacional.
Incautan dos toneladas de cocaína
En otra acción de la Armada Nacional, en colaboración con Guardacostas de Costa Rica y la Fuerza de Tarea Conjunta Interagencial del Comando Sur de los Estados Unidos, se dio otro golpe contra narcotraficantes transnacionales.
La incautación de 2072 kilogramos de clorhidrato de cocaína en el mar Caribe fue posible gracias a la información de inteligencia proporcionada por la Armada colombiana, que alertó a las autoridades de Costa Rica sobre los estupefacientes en dos embarcaciones tipo go fast que navegaban por aguas costarricenses.
En la primera operación, se logró la interdicción marítima de una embarcación en el área general de Tortuguero, Costa Rica, tripulada por dos sujetos, un colombiano y un venezolano, que transportaban ocultos 1033 kilogramos de clorhidrato de cocaína.
Mientras tanto, en la segunda operación, se logró la incautación de 1.039 kilogramos del alcaloide luego de la interdicción marítima de una lancha a cinco millas náuticas de Bocas del Río, Vizcaya - Costa Rica. Además, en esta última operación fueron capturados tres sujetos de nacionalidad costarricense.
Las incautaciones de más de dos toneladas de clorhidrato de cocaína representan una pérdida cercana a los 70 millones de dólares para las organizaciones narcotraficantes transnacionales que delinquen en el Caribe.