En la noche del jueves 23 y la madrugada de este viernes 24 de noviembre, los colombianos sintieron varios movimientos telúricos que se registraron de forma seguida durante toda la noche. Los eventos se dieron en el nororiente del país, más exactamente en Santander y hasta el momento no se registran afectaciones mayores.
El Servicio Geológico Colombiano reportó tres temblores de diferente magnitud en menos de cinco horas. El primero se dio a las 10:40 p. m. del jueves. Este fue el que tuvo el movimiento más fuerte, con 41, grados. El boletín reportado por esa entidad aseguró que la intensidad del temblor fue de cinco, lo que significa que este pudo sentir fuertemente. La profundidad fue de 146 kilómetros.
El segundo se presentó a las 2:15 a. m. del viernes, con una magnitud de 3,3 y una profundidad de 141 kilómetros. El último se registró a las 3:12 a. m. y la magnitud fue de 3.1 grados y 141 kilómetros de profundidad. Según el reporte, todos los sismos tuvieron como epicentro la región de Los Santos, que ya ha registrado con anterioridad cientos de eventos telúricos de diferentes magnitudes.
Durante la semana también se han registrado diferentes temblores en otras regiones del país. De hecho, el jueves 23 también se dio otro sismo en el departamento del Tolima, registrado exactamente a 23 kilómetros del municipio de Planadas. Ese movimiento se dio a las 00:46 horas y la magnitud aproximada fue de 2,9 grados. La profundidad de este fue menor a los 30 kilómetros.
Tanto en este como en los movimientos recientes, los organismos de socorro se mantienen alerta ante cualquier situación de riesgo que pueda ser ocasionada por los mismos, además de las rutas de evacuación. Pese a ello, los expertos dan una serie de recomendaciones para salvaguardar la vida y la integridad en un caso de estos.
¿Qué se debe hacer ante un movimiento telúrico?
- En caso de estar en la cocina al momento del temblor, apagar la estufa y proceder a buscar resguardo.
- Si se está en la cama al momento del sismo, esperar y permanecer allí, protegiendo la cabeza con una almohada. “La probabilidad de lesionarse es menor si se queda donde está. El vidrio roto en el piso puede causarle lesiones si camina o se acuesta en el piso”.
- Alejarse de objetos de vidrio, objetos colgantes, estantes de libros, vitrinas o de otros muebles grandes que se puedan caer.
- Si hay objetos cerca, usarlos para protegerse la cabeza y el rostro en caso de que se presente caída de escombros o vidrios.
¿Qué no se debe hacer en un sismo?
- No salir de la casa ni correr a otros cuartos durante un terremoto. La probabilidad de lesionarse es menor si la persona se queda en un solo sitio.
- No ponerse debajo de los marcos de las puertas. Otras personas podrían tener la misma idea.
- No usar los ascensores. Es posible que durante un terremoto se vaya la luz y estos se detengan.
- No correr desesperadamente fuera de los edificios o casas durante el terremoto, pues podría presentarse la caída de ventanas, postes, luminarias, entre otros objetos.
¿Cómo prevenir o evitar graves consecuencias con un sismo?
Verifique la sismorresistencia de la vivienda: Si la vivienda es producto de autoconstrucción familiar y/o fue construida antes del año 1998, muy seguramente no cuenta con sismorresistencia. Si no está seguro de la forma como fue construida, solicite apoyo a la oficina de planeación de la alcaldía municipal.
Si la vivienda es sismorresistente, ubique los sitios seguros: Estos son: columnas y sitios a alejados de ventanas, lámparas, muebles u objetos que puedan caer, volcarse o romperse. Durante un sismo, muchas personas resultan lesionadas por objetos que caen dentro de su propia vivienda.
Si la vivienda no es sismorresistente, ubique lugares seguros en el “exterior”: busque áreas en lo posible despejadas, lejos de árboles altos, postes, cables y fachadas de edificios, los cuales serán usados como “Punto de encuentro”.