Más de nueve años estuvieron las autoridades detrás de Dairo Antonio Úsuga, alias Otoniel, el principal narcotraficante del país y uno los más grandes del mundo, comparable incluso con el mexicano Joaquín ´El Chapo´ Guzmán.
Tras su captura, el 23 de octubre en zona selvática del Urabá Antioqueño, en el marco de la Operación Osiris, el medio de comunicación El Espectador, conoció en una investigación, que la organización de la que era líder alias Otoniel quería matar a Carlos Díaz, un cantante de música popular.
Díaz se habría acercado al grupo criminal al ser contratado, sin que supiera de quién se trataba, para una fiesta de fin de año organizada por alias Giovanni, quien era considerado uno de los amigos de Otoniel.
Según El Espectador, el cantante le contó a la Fiscalía General de la Nación que no pudo acudir a la fiesta pues el sitio donde se realizaría fue cambiado alrededor de tres veces. Sin embargo, gracias a un GPS instalado en el estuche de uno de los instrumentos que sería parte de la festividad, el lugar de celebración fue encontrado por la Policía Nacional.
Las amenazas a Díaz se dieron después que Otoniel pensara que el cantante fue quien colaboró con las autoridades para encontrarlos. Sin embargo, en dicho operativo, solo fue posible capturar a alias Giovanni.
Las sospechas del líder del Clan del Golfo aumentaron cuando escuchó, según el medio de comunicación, que el general José Roberto León Riaño, en ese entonces director de la Policía, dijo: “fue una fuente humana la que permitió corroborar la ubicación de alias Giovanni. Al artista se le pagarán 1.500 millones de pesos de recompensa”.
Dichas declaraciones habrían motivado a alias Otoniel para mandar asesinar a Carlos Díaz. Segúm el medio, la Fiscalía comprobó las amenazas y constató llamadas en donde se escuchaban las intimidaciones.
Extradición de alias Otoniel
El presidente de la República, Iván Duque, confirmó en una declaración que dio el jueves 25 de noviembre, que las autoridades de Estados Unidos enviaron oficialmente la solicitud de extradición de Dairo Antonio Úsuga, alias Otoniel.
El jefe de Estado aseguró que se han venido adelantando lo trámites correspondientes en el Ministerio de Justicia y en el Ministerio de Relaciones Exteriores y esa petición formal de extradición fue puesta en conocimiento de la Corte Suprema de Justicia.
“Respetando la independencia de poderes, pero también amparados en la colaboración armónica en la conversación que he tenido con el presidente de la Corte Suprema de Justicia esperamos darle total celeridad a ese trámite y que se pueda avanzar en la extradición de este peligroso delincuente”, sostuvo Duque.
Medidas de seguridad extra
El poderío de alias Otoniel, que se mantiene vigente con él tras la rejas, hace que sea prioridad para el Gobierno la custodia de este narco mientras es enviado en extradición a Estados Unidos. Según conoció SEMANA, por motivos de seguridad, en horas de la madrugada del 10 de noviembre, Otoniel fue trasladado desde el búnker de la Dijín de la Policía, en la localidad de Los Mártires, hacia otros calabozos de la Dijín.
Justamente, la necesidad de mantener a Otoniel tras la rejas, y sin ninguna posibilidad de intervención externa sobre su sitio de reclusión, hace que el paradero del capo del narcotraficante no haya sido revelado por las autoridades, y aunque mantienen silencio frente al nuevo sitio de reclusión del exjefe del Clan del Golfo, SEMANA pudo confirmar que está en los calabozos de la Dijín en la avenida El Dorado con Boyacá.