Las disidencias de las Farc (Gaor 33) planearon los ataques contra el presidente Iván Duque no solo en Cúcuta, sino cerca a Bogotá.
Las autoridades han logrado obtener evidencia contundente de los planes criminales para asesinar al presidente Iván Duque. Un mapa en poder de los investigadores muestra exactamente lo que las disidencias querían hacer cerca de Bogotá para derribar el avión presidencial con el primer mandatario a bordo, cuando estuviera a punto de aterrizar en la base militar de CATAM.
En el mapa se ven señalados los puntos de referencia donde se ubicarían los francotiradores en el área de Funza, Cundinamarca. El Punto R1, (francotiradores en el puesto número 1 de ataque) estaría a 2.3 kilómetros del inicio de la pista y ubicado a los 123 grados, sobre la vereda El Hato. El pinto R2 (francotiradores en el puesto número 2 de ataque) se ubicaría a 4 kilómetros de la zona de aterrizaje, sobre la vereda La Palmas.
Cuando el avión presidencial estuviera a baja altura y con poca velocidad activarían el ataque con “fusiles tipo Barrett calibre 50mm (francotiro) y explosivos tipo rampa o llovizna”, dice un documento exclusivo conocido en exclusiva por SEMANA.
Otra prueba es la compra de una casa y dos camionetas para ejecutar el atentado en Bogotá. Los investigadores también confirmaron el traslado a la capital del país hace 15 días de 10 disidentes de las Farc expertos en operaciones de asalto.
Entre tanto, a los 10 capturados se les incautaron 23 celulares, cinco vehículos, 185.620.000 pesos, tres USB, dos discos duros, una tableta, una minigrabadora, cinco computadores, una moto, un revólver calibre 38 con 24 cartuchos y una pistola Jericó. En los dispositivos había información clave para esclarecer no sólo el atentado al helicóptero presidencial en Cúcuta, sino el atentado con carrobomba a la Brigada 30 que dejó 44 heridos.
Hasta ahora, en los dispositivos incautados se encontraron estrategias para conseguir recursos y planear la logística, planos de los lugares donde iban a atacar, hablan del “Objetivo Colombia 6”, refiriéndose al presidente, solicitan “autorización” para ejecutar el hecho, muestran el plano general del aeropuerto Camilo Daza, de Cúcuta, y anexan un informe detallado de los equipos de comunicaciones que se requieren.
“Necesito comprar dos radios VHF frecuencia aérea y marítima de 7.5 wtt. Valor aproximado 12 millones de pesos cada uno”, dice uno de los mensajes encontrados por las autoridades. También aparece una solicitud de alias Darwin: “Necesito que me autorice la llevada de dos fusiles para la misión Colombia 6”. De hecho, horas después del atentado contra el helicóptero presidencial, fueron hallados dos fusiles cerca al aeropuerto Camilo Daza.
Parte del plan de alias Jhon Mechas de las disidencias era poner en marcha varios atentados en Cúcuta para garantizar que el presidente Duque viajaría a esa ciudad. Así que la Fiscalía tiene registro de que el grupo criminal también pretendía atacar el comando de la Policía en Norte de Santander con un carro bomba y explosivos lanzados desde rampas fijas, ubicadas a 200 metros.
Además, planeaban atentar contra la Sijín de la Policía, en el sector Corral de Piedra, en Cúcuta, con explosivos llevados desde Tibú a esa ciudad. El material, al parecer, fue almacenado en una vivienda del barrio Cerro Pico, donde funciona una chatarrería. También pretendían activar carros bomba en la sede de la Fiscalía y el Palacio de Justicia, en Cúcuta. Para ello pensaban usar un bus o un vehículo de alta gama, con placas venezolanas.
Los investigadores continuarán recuperando la información de los dispositivos incautados en medio de las capturas, celulares y computadores, donde las evidencias son contundentes. No hay duda de que al presidente lo querían asesinar a como diera lugar. Los planes criminales eran muy serios y graves. Por fortuna fueron detectados.