Después de más de seis meses de investigación, el exalcalde de Chipaque, Camilo Albeiro Pardo Muñoz, habló ante un medio de comunicación nacional y negó las acusaciones de abuso sexual hechas por Yury Castellanos, quien se desempeñaba como directora de la Unidad Municipal de Asistencia Técnica Agropecuaria (Umata) durante su administración.
La denuncia contra Pardo fue presentada por Castellanos a la opinión pública a finales del año anterior. Ante esto, el exalcalde emitió un comunicado en el que admitió haber tenido una relación extramarital con Castellanos, pero insistió en que todas las interacciones fueron consensuadas.
En entrevista con Noticias RCN, Pardo reveló un video que, según el canal, tiene más de cinco horas de duración y es el material con el cual Pardo pretende desmentir varias de las acusaciones que la mujer emitió en su contra.
En material audiovisual se ve que el hoy exalcalde está en una reunión en donde departe con varios funcionarios de la Administración. Allí se encontró con la presunta víctima y el motivo del encuentro coincide en las dos versiones: firmar unos documentos.
Castellanos afirmó que Pardo la forzó a beber y la tocó sin su consentimiento, mientras que Pardo asegura que las muestras de afecto fueron mutuas y voluntarias. Una mesera que los atendió corroboró la versión de Pardo sobre las muestras de afecto.
El conductor de Pardo, Santiago Carrillo, también apoyó la versión del exalcalde, afirmando que Castellanos nunca fue obligada a subir al vehículo y que las relaciones sexuales fueron consensuadas.
En su versión inicial, Yury aseguró que “yo no quería tomar… él es quien me sirve en trago, quien me embute el trago”, pero por su parte Camilo aseguró que él nunca la forzó y lo trata de demostrar con el video.
“Ella manifiesta que yo la emborracho. Si usted mira en todas las horas de video, ella toma de manera voluntaria; es más, compartimos, brindamos, me da trago a mí, yo le doy algunos tragos. Pero si usted mira, yo tomo casi el doble o triple de lo que ella toma y eso lo tenemos como prueba técnica, pero en ningún momento nadie la obliga y ella lo hace de manera voluntaria”, aseguró Pardo a Noticias RCN.
Después de varias horas de departir empiezan a suceder cosas que tanto víctima como acosado interpretan de manera diferente.
En su primera versión, la joven Castellanos aseguró que “me siento y él empieza a tocarme las piernas, yo tenía una camisa y la tenía metida por dentro del pantalón y él me la saca, era a cogerme y tocarme, pero yo le decía que no, que me dejara quieta y no me molestara”.
Por su parte, Pardo señaló que “nosotros entrelazábamos las manos, nos abrazamos, ella me arreglaba el saco, se reía y me abrazaba, me cogía la cara, yo le cogía la cara a ella. Obviamente, había un consentimiento mutuo que se evidencia en los videos”.
Dicho medio también habló con la mesera que los atendió, quien se convirtió en testigo clave y quien, según los videos, constantemente se acercaba a la mesa.
“Las muestras de afecto que ella le hace a él son evidentes. Recuerdo ver desde el otro costado la insinuación que ella tenía para tocarlo. Le arreglaba la chaqueta, la camisa, el cuello”, dijo la testigo.
Pardo señaló que lo que se evidenció esa noche fue el resultado de un romance de cerca de cuatro meses.
“Era una relación afectiva. Yo soy un tipo casado, con hijos y lo que cometí fue un gran error. Le fui infiel a mi esposa, pero realmente ese día ya teníamos una relación de tiempo atrás”, contó el exalcalde al periodista.
Pardo estuvo de acuerdo con el entrevistador que por más que algunas personas se encuentren para consumir alcohol, ninguna tiene derecho a violar a la otra.
“Uno porque toma no tiene derecho a abusar de nadie, pero en este caso ella se sube al carro de manera voluntaria y ella tiene una relación (sexual) conmigo antes de llegar al Boquerón, de manera también voluntaria”, dijo.
“Ella estaba totalmente despierta y en ningún momento la abusé. Ella lo hizo de manera totalmente voluntaria dentro del vehículo”, reiteró.
En las más de cinco horas de grabación, se evidencia la presencia permanente de Santiago Carrillo, quien para ese entonces era el conductor de Pardo y quien resulta tener un testimonio de alto valor para las autoridades.
Según Carrillo, la presunta víctima estaba promoviendo que todos se fueran para Villavicencio, pero es el alcalde quien dice que él prefiere irse para donde su esposa y sus hijos.
“Ella dijo: yo me voy para donde se vaya Camilo Pardo”, aseguró Carrillo, quien también dialogó con el medio.
En medio de su relato, el conductor contó que Yury Castellanos nunca fue obligada a subirse a la camioneta. “En ningún momento dijo que la dejaran ahí o que la llevaran a la casa, ni que se quería ir ni que se sentía obligada”.
Hacia la medianoche solo quedaron el conductor, el alcalde y Yury en la camioneta. Según Carrillo, lo que él hizo fue subir el espejo retrovisor mientras ellos tenían relaciones sexuales dentro del vehículo.
“Pero dentro de la camioneta no hubo ningún golpe, ningún grito de auxilio ni nada similar”, dijo.