Argentina y Perú son dos de los países de América Latina que ya han identificado casos de la variante delta, temida por su mayor transmisibilidad. Será inevitable que llegue a Colombia y sus posibles efectos preocupan, porque el país apenas está empezando a salir de la tercera ola devastadora.
El ministro de Salud, Fernando Ruiz, ratificó que es imposible evitar que la variante ingrese al país. Además, dejó claro que es posible siempre que haya variantes en el territorio no detectadas aún.
“Siempre va a existir ese riesgo”, aseguró Ruiz, resaltando que se ha hecho un esfuerzo enorme por lograr identificarla e insistió en que es un hecho que la variante delta va a llegar a Colombia.
“La variante delta va a estar en el país, va a llegar y ya es un tema de lograr su identificación; por ahora no se ha identificado, pero esperemos en los próximos días cómo evoluciona el tema”, explicó.
Esta variante es catalogada como preocupante en todo el mundo, precisamente porque tiene mayor capacidad de contagio que el virus “original”. Fue inicialmente detectada en la India, aunque ya circula en más de 80 países en el mundo y, tal como sucedió con la P.1. o gamma y alfa, que también ingresó al país a pesar de algunos esfuerzos por evitarlo.
De todas maneras, cabe aclarar que nada ha demostrado que provoque mayor mortalidad. De hecho, en Reino Unido se levantarán casi todas las restricciones desde el 19 de julio, porque si bien los contagios han aumentado ante la presencia de la variante delta, no ha sucedido lo mismo con los decesos a causa del virus, lo que podría ser una prueba también de la eficacia de las vacunas.
Debido a la inminente llegada de la variante delta al país, el Gobierno ha sumado esfuerzos para que la vacunación avance con velocidad y así evitar que cause estragos cuando toque Colombia, si no lo ha hecho aún.
“De aquí en adelante esa va a ser la historia: entraremos en el periodo de transformación de pandemia a endemia y vamos a tener que convivir con la covid-19. Eso quiere decir que eventualmente habrá que aplicar refuerzos de vacunas para las variantes que requieran reforzar la inmunidad”, dijo Ruiz en días pasados.
Por su parte, la alcaldesa de Bogotá, Claudia López, dijo que el mayor riesgo que afronta Colombia en el momento es que la variante llegue y produzca un aumento de contagios.
“El Instituto Nacional de Salud dice que todavía no tiene evidencia de que tenga presencia dominancia en Colombia, lo cierto es que la vigilancia que hace es muy precaria, muy pequeñita; de hecho nos ponemos a su disposición para apoyarle en que haga una mayor vigilancia genómica y podamos detectar esa variante delta oportunamente”, pronunció la mandataria, insistiendo en que es riesgoso que llegue y se vuelva dominante.
Si bien aseguró que no hay manera de controlar el comportamiento de la variante y si se vuelve o no dominante, lo que la ciudadanía sí puede controlar es su comportamiento frente al virus. Es decir, manteniendo las medidas de bioseguridad más estrictas y básicas: uso de tapabocas, lavado de manos, distanciamientos y espacios ventilados.