En redes sociales circula un video del momento preciso de un robo a mano armada a un vehículo que se movilizaba en la carrera 9 con calle 145 al norte de Bogotá. En las imágenes se ve cómo amedrentan al conductor y rompen el vidrio del vehículo para quitarle sus pertenencias aprovechando el trancón, que han vuelto a presentarse en la capital debido al regreso de las personas a las calles y a la ausencia de la medida de pico placa.
En el video, grabado desde el balcón de su residencia por un vecino de la vía, se ve cómo luego del atraco las víctimas tratan de seguir a los asaltantes, que escapan del lugar de los hechos transportándose en una moto.
Un usuario de redes sociales publicó fotos de los hechos manifestando que al mismo tiempo se produjo otro robo en el sentido contrario de la vía.
"Tres disparos por robarse un celular. Acaba de ocurrir en la carrera 9 con calle 145. Cuatro hombres en dos motos atacaron este carro y rompieron su vidrio delantero derecho. Al otro lado de la avenida estaba ocurriendo otro robo". Este viernes también se supo de un robo en la calle 122 con carrera 19, que dejó a un vigilante herido.
Según el general Óscar Gómez Heredia, comandante de la Policía Metropolitana de Bogotá, el vehículo de la víctima y los asaltantes ingresaron a un edificio. “Ahí tienen una conversación con el afectado, el vigilante opone resistencia y es lesionado en una de sus piernas”. Uno de los ladrones fue capturado, según informe de la Policía: "Se le encuentra un arma de fuego tipo pistola, un chaleco antibalas y una bolsa con un dinero, aproximadamente 262 millones de pesos”.
La ciudadanía se ha mostrado preocupada por el aumento de la inseguridad en la ciudad desde la pandemia. Al respecto, la alcaldesa Claudia López ha dicho que desde que empezó la cuarentena ha bajado la criminalidad en general, pero que delitos como el asesinato y el robo a biciletas ha aumentado. La mandataria ha trabajado un Puesto de Mando Unificado (PMU) junto con el Gobierno y la Policía para tratar esta problemática y ha pedido que haya más uniformados en las calles, pues su presencia se ha reducido en un 20 por ciento porque están aislados por la cuarentena y por los infectados por la enfermedad.