Un dramático incidente sacudió a la comunidad de Zipaquirá, Cundinamarca, cuando una mujer de avanzada edad fue violentamente derribada por un perro que corría sin control en un conjunto residencial. El hecho fue captado por cámaras de seguridad.
La víctima, quien regresaba de hacer compras, sufrió una aparatosa caída que la dejó inconsciente en el acto. Las imágenes dejan ver cómo un joven se acercó inmediatamente para intentar ayudarla, mientras el perro permanecía en la escena.
Todo ocurrió el pasado domingo 23 de junio, alrededor de las 8 a. m. Tras el incidente, la mujer fue trasladada al hospital local y, posteriormente, remitida al hospital La Samaritana, en Bogotá, por la complejidad de las heridas, pues sufrió una fractura en la columna que la podría dejar parapléjica.
Wilson López, hijo de la afectada, reveló que su madre será sometida a una delicada cirugía.
“Estamos esperando la autorización para hacerle la cirugía a mi madre, ya que tienen que hacerle un implante en la médula. Los médicos nos dicen que hay una posibilidad de que no quede cien por ciento igual a como estaba”, declaró angustiado a Noticias Caracol.
Aunque la mujer es pensionada, dice Wilson, la mayoría de los costos sobrepasan sus ingresos y la familia ha tenido que asumir todo lo que tiene que ver con traslados. El dueño del perro, asegura el hijo, apenas ha dado 100 mil pesos.
“Gracias a Dios, mi madre es pensionada, pero aun así, a nosotros nos ha tocado asumir los gastos del traslado de nosotros, todo lo que acarrea venir de Zipaquirá acá. El propietario del animal solo ha mandado 100 mil pesos”, agregó.
El incidente ha desatado un debate sobre la responsabilidad de los dueños de mascotas. El abogado de la familia, Miguel Hernández, enfatizó que el video muestra al perro sin supervisión, lo cual podría tener serias implicaciones legales.
“Esto va a trascender más allá. El Código de Procedimiento Penal establece que nosotros respondemos por acción o por omisión. En este caso, hay una omisión del tenedor del animal por cuanto no lo tenía con triadilla (bozal y correa), el animal se encontraba en una zona común, entonces eso genera una respetabilidad. También puede haber una responsabilidad civil frente a la administración del conjunto porque deben tener un reglamento de manejo de caninos que no ha sido enviado a nosotros” dijo a Blu Radio.
Este caso pone de manifiesto la urgente necesidad de reforzar las medidas de seguridad y control de mascotas en áreas residenciales, mientras la comunidad exige acciones concretas para la víctima y su familia.