En Colombia, el sector del transporte de carga continúa su paro nacional por segundo día consecutivo, en respuesta al reciente incremento en el precio del diésel, decretado por el Gobierno nacional el 31 de agosto. Esta medida, que elevó el costo del galón de ACPM de 9.456 a 11.360 pesos, ha desencadenado una serie de protestas y bloqueos a nivel nacional.
La decisión gubernamental ha llevado a un colapso en la movilidad en varias regiones del país. Según la Policía Nacional, además de los problemas en Bogotá, se han registrado once afectaciones significativas en municipios de Boyacá, Nariño, Norte de Santander, Santander, Meta y Cesar.
Las protestas de los camioneros se centran en el impacto económico que este aumento de 1.904 pesos en el precio del diésel está teniendo en el sector, que enfrenta dificultades crecientes para operar bajo tales nuevas condiciones.